Servicio diario - 24 de octubre de 2019


 

Mons. Edwin Kriutler: "Es un escándalo que ciertas comunidades no tengan Eucaristía los domingos"
Rosa Die Alcolea

"Nuestra Madre Tierra": Francisco explica la visión cristiana de la ecología
Larissa I López

La Asamblea, "esperanza" para los pueblos indígenas
Larissa I López

Ecuador: El episcopado se reúne con el gobierno para actuar como mediador
Redacción

Secretaría de Estado: El Papa nombra al consejero de Asuntos Generales
Larissa I López

Card. Ravasi: La Biblia, "horizonte ideal" para la cultura occidental
Larissa I López

Academia de las Ciencias: Frances H. Arnold, nombrada miembro titular
Redacción

Monseñor Enrique Díaz Díaz: "¿Fariseos?"
Enrique Díaz Díaz

San Bernardo Calbó, 25 de octubre
Isabel Orellana Vilches


 

 

 

24/10/2019-11:53
Rosa Die Alcolea

Mons. Edwin Krüutler: "Es un escándalo que ciertas comunidades no tengan Eucaristía los domingos"

(ZENIT — 18 oct. 2019).- Monseñor Erwin Kráutler sostiene que el celibato "no está por encima de la Eucaristía", y asegura que para él, "es un escándalo que ciertas comunidades no tengan la Eucaristía".

Así lo expresó en una entrevista exclusiva a este medio, en el marco de su participación en el Sínodo Especial para la Amazonía, que se celebra en el Vaticano hasta el 27 de octubre, con el objetivo de buscar nuevos caminos para la Iglesia y para una Ecología integral.

El obispo austriaco llegó a la Prelatura del Xingú, en la Amazonía brasileña en 1965, donde fue obispo de 1981 a 2015. Además ha sido el coordinador de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) en Brasil. Estos 54 años le han permitido conocer y denunciar muchas situaciones de injusticia contra los pueblos y el medio ambiente.

De esta manera, él ha podido comprobar durante estos años las carencias de muchas comunidades amazónicas, pero sobre, la más importantes: Hay comunidades que no tienen Eucaristía los domingos, o en las fiestas litúrgicas, ni en las grandes fiestas de sus patronos, etc.

En el marco de la Asamblea sinodal, el obispo es defensor no solo de la institución de los viri probati, hombres casados "probados" por su fidelidad a la Iglesia que podrán ser ordenados sacerdotes para las comunidades indígenas en la Amazonía, sino que va más allá: Mons. Kráutler no descarta la ordenación de mujeres, "persona probati". De momento, asegura que el diaconado femenino para la Región Amazónica "tiene que salir" en este Sínodo.

En un encuentro en 2014 con el Papa Francisco, el obispo Kráutler fue el primero en plantear abiertamente cómo resolver el problema de la celebración eucarística en las comunidades amazónicas, entre otras preocupaciones que afronta la Iglesia en la Amazonía, desde su perspectiva, como la situación que viven los pueblos aislados, o la construcción de plantas hidroelétricas que daña a los territorios, y por lo tanto, a las poblaciones indígenas.

"Después el Papa me dijo que estaba escribiendo una Encíclica "Laudato Si"' y yo le pedí que no se olvidase de la Amazonía y de los pueblos indígenas", cuenta a zenit el obispo austriaco. Como fruto de esta consulta al Santo Padre, el obispo señala que en los números 38 y 146 se ven reflejadas estas preocupaciones por la Amazonía.

A continuación, ofrecemos la entrevista concedida en exclusiva a zenit por el obispo Erwin Kráutler:

...

 

zenit: Desde su experiencia en la provincia de Xingú, dos terceras partes de las comunidades eran lideradas por mujeres. ¿Usted cree que la Iglesia debe instituir un ministerio diaconal para la mujer?

Mons. Kráutler: Sí, sin duda. Creo que es una necesidad y pienso que en la actualidad, en la realidad que vivimos siempre poner a las mujeres en segundo plano es absurdo. Nosotros no podemos perder este momento porque las mujeres están esperando alguna decisión. Imagínese: Si nada acontece alrededor de las mujeres, la frustración será total. Muchos obispos piensan lo mismo que yo, inclusive en el círculo menor en el Sínodo, varios obispos tienen la misma opinión.

 

zenit: Usted aboga por el diaconado femenino, pero no por el ministerio ordenado para las mujeres...

Mons. Kráutler: Este es el primer paso, el del diaconado. Hay un problema con la carta apostólica del Papa Juan Pablo II del 94, Ordinatio Sacerdotalis, que dice que la Iglesia no tiene la permisión de ordenar mujeres, pero no es un dogma. Entonces, para mí llegó el momento en que debemos pensar en esta posibilidad. Yo sé que en este Sínodo no va a salir, pero el diaconado tiene que salir. Las mujeres toman las riendas de las comunidades, no solamente en el Xingú, yo sé que más de la mitad de comunidades sin sacerdotes son dirigidas por mujeres.

 

zenit: Desde el punto de vista sacramental, el diácono puede bautizar, presidir en el matrimonio, celebrar las exequias, leer el Evangelio y predicar en la Misa, distribuir la comunión y dar la bendición con el Santísimo Sacramento. En el caso de que se apruebe el diaconado para la mujer para la Región Panamazónica, esto no solucionaría que en muchas comunidades se pueda celebrar la Eucaristía. ¿Qué soluciones ve usted?

Mons. Kráutler: Yo hablo de "persona probati", no tanto de viri probati, porque viri probati es solo para el sexo masculino, y las mujeres automáticamente son excluidas. El primer paso para llegar a eso para mí es el diaconado femenino.

 

zenit: Ante la falta de vocaciones al sacerdocio en la Amazonía, ¿podría ser una opción trasladar allí a más sacerdotes hispano hablantes de Europa o de América Latina, más cercanos a la cultura de los pueblos amazónicos?

Mons. Kráutler: El sacerdote debería salir de la propia comunidad (amazónica). Lo otro, son soluciones paliativas. No es tan fácil, porque la adaptación, la inculturación... para los europeos no es fácil.

 

zenit: ¿De qué medidas concretas se está hablando en el Sínodo para la formación de los seminaristas en la Amazonía?

Mons. Kráutler: La formación de los seminaristas necesita, desde mi punto de vista, una formación "con los pies en la tierra", es absolutamente imposible no formar a los presbíteros que piensan que el sacerdocio es un salto a un "estatus social mejor", más elevado. Muchos de ellos salían de familias pobres y se metían en el sacerdocio. La humildad y el servicio para el conocimiento de los pueblos, de las personas, es fundamental. Como dice el Papa Francisco, el sacerdote "tiene que oler a oveja". No necesitamos padres de "estatus elevado", sino padres que estén aquí, con los pies en la tierra.

 

zenit: Si se pueden ordenar finalmente a hombres casados en la Amazonía, eso sería una excepción de la norma, ¿no?

Mons. Kráutler: Sí, las estructuras se cambiarían. Pero el celibato no está por encima de la Eucaristía. El celibato es una ley humana. Al instituir la Eucaristía, Jesús dijo "hagan esto en memoria mía". Para mí es un escándalo que ciertas comunidades no tengan la Eucaristía los domingos, o en las fiestas litúrgicas, ni en las grandes fiestas de sus patronos, etc.
Yo creo que tenemos que llegar a una solución para eso y eso es urgencia, urgentísima. Lo estamos perdiendo. La Eucaristía es la esencia, es el centro de nuestra fe.

 

zenit: Si se aprueba esta excepción, ¿usted no piensa que en otros lugares del mundo la Iglesia se pedirá también esta excepción?

Mons. Kráutler: Sí, pueden pedirla. Vamos a ad experimentum en la Amazonía y después se verá en Alemania... en Francia... en Austria, que lo conozco. En España, etc.

 

 

 

24/10/2019-15:17
Larissa I. López

"Nuestra Madre Tierra": Francisco explica la visión cristiana de la ecología

(ZENIT — 24 oct. 2019).- Nuestra Madre Tierra. Una lectura cristiana del desafío del medio ambiente, el nuevo libro del Papa Francisco, ha sido publicado hoy, 24 de octubre de 2019, por la Librería Editorial Vaticana.

La obra contiene una recopilación de textos en los que Francisco se refiere a la defensa del medioambiente. Entre todos ellos, se encuentra uno inédito en el que el Santo Padre explica la visión cristiana de la ecología, indica Vatican News.

Además, incluye un prefacio del Patriarca Ecuménico Bartolomé I. En él, se describen las etapas de la colaboración entre ambos, en particular en los mensajes con ocasión de la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación.

Dicha jornada fue constituida en 2015 y une a la Iglesia católica y a la Iglesia ortodoxa en "preocupaciones comunes por el futuro de la creación".

 

Conversión ambiental

El primer capítulo, de acuerdo al medio vaticano, se denomina "Visión integral" y contiene una selección de textos, sobre todo fragmentos de la Encíclica Laudato Si', que subrayan la necesidad de proteger la casa común a través de la unión de "toda la familia humana en la búsqueda del desarrollo sostenible e integral".

Esta última idea se desarrolla en el capítulo "De un desafío de época a una oportunidad global", a partir del análisis de algunos extractos de la citada Encíclica del Santo Padre en torno a la situación actual de la crisis ambiental.

Así, la contaminación, el calentamiento global, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad constituyen las consecuencias de una explotación incontrolada consignada a seguir creciendo exponencialmente a menos que se produzca un cambio de sentido a corto plazo.

Ante ello, el Papa apunta que es necesaria una conversión ambiental que sea posible a través de la promoción de una verdadera educación ecológica que cree, especialmente en las nuevas generaciones, una toma de conciencia y, por lo tanto, una conciencia renovada.

 

Custodia de la creación y la vida

El libro, según la misma fuente, presenta una parte con discursos, audiencias y homilías que demuestran que Francisco, desde los primeros días de su pontificado, se refiere a la urgencia de afrontar el problema de la ecología. Se trata, de acuerdo a la misma fuente, de salvaguardar el inmenso don que Dios ha dado a todo ser vivo, pero sobre todo al hombre, el único que ha recibido el aliento de Dios "soplado en su rostro".

Por medio del Génesis, el Pontífice remarca que la custodia de la creación y la custodia de la vida humana están íntimamente conectadas y son indisociables. Asimismo, debido a estas razones, reclama el libre acceso a los bienes de la tierra necesarios para la supervivencia, situando en primer lugar el agua, sin discriminación alguna entre los pueblos.

 

Teología de la ecología

La obra concluye con el citado artículo inédito, titulado "Nuestra Madre Tierra, en el que el Papa Francisco ofrece una perspectiva cada vez más amplia de un discurso que no solamente implica la preocupación por el medioambiente.

A pesar de compartir muchos aspectos con la ecología secular, esta no puede ser comparada con el mensaje papal. De hecho, se describe la denominada teología de la ecología, un discurso profundamente espiritual.

 

La creación, fruto del amor de Dios

La creación es concebida como el fruto del amor de Dios, por cada una de sus criaturas, sobre todo por el ser humano, al que concedió el don de la creación, el lugar donde "estamos invitados a descubrir una presencia".

"Pero esto significa que es la capacidad de comunión del hombre la que condiciona el estado de la creación (...) Por lo tanto, es el destino del hombre el que determina el destino del universo", indica el Obispo de Roma.

Por otro lado, la conexión entre el hombre y la creación vive en el amor y se corrompe si fracasa y no reconoce el don que se le ha dado. La explotación irresponsable de los recursos para lograr poder y riqueza, en manos de unos pocos, comporta un desequilibrio que lleva a destruir el mundo y a las personas.

 

Estado de emergencia

El Santo Padre se cuestiona si el estado de emergencia ambiental en el que estamos inmersos puede convertirse en una oportunidad para retroceder, elegir la vida y revisar los modelos económicos y culturales que hacen reales la justicia y el compartir y en los que todo ser humano ostenta su propia dignidad y derechos.

En una sociedad como la actual en la que se privilegia el tener por encima del ser, los que no tienen nada "corren el riesgo de perder el rostro, porque desaparecen, de convertirse en uno de los invisibles que pueblan nuestras ciudades", expuso Juan Pablo II.

Las estructuras de pecado, añade el papa polaco, "producen maldad, contaminan el medio ambiente, hieren y humillan a los pobres, favorecen la lógica de la posesión y del poder".

 

Perdón

Para el Papa Francisco, la revolución tecnológica y el compromiso individual no son soluciones suficientes, ya que la conciencia se adquiere principalmente a través de un "auténtico espíritu de comunión".

Así, es preciso recurrir al perdón: "pedir perdón a los pobres, a los excluidos, en primer lugar, para poder pedir perdón también "a la tierra, al mar, al aire, a los animales....", afirmó.

Y agrega que pedir perdón significa examinar totalmente el propio modo de ser y de pensar, renovarse profundamente. Y este perdón solo es posible en el Espíritu Santo, es una gracia que se ha de pedir a Dios con humildad.

 

Eucaristía

Además de revisar el estilo de vida y cambiar la mentalidad, el Pontífice habla sobre la necesidad de presentar una visión. Dicha visión es aprendida por el creyente a través de la liturgia, especialmente en la Eucaristía.

El hombre ofrece el pan y el vino, alimentos obtenidos del trigo y la uva a partir de una transformación de la naturaleza realizada por el ingenio humano, y el Espíritu Santo los convierte el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Dios devuelve dichos alimentos en su propio Hijo.

De este modo, el pan y el vino forman parte de una circularidad de símbolos: don de Dios, compromiso del hombre, trabajo, esfuerzo comida necesaria y cotidiana, pan, alegría y celebración del vino.

"Y así como en la Eucaristía el pan y el vino se convierten en Cristo porque están bañados en el Espíritu — el amor personal del Padre —, la creación se convierte en la palabra personal de Dios cuando se usa con amor", expresa el Pontífice.

 

 

 

24/10/2019-16:44
Larissa I. López

La Asamblea, "esperanza" para los pueblos indígenas

(ZENIT — 24 oct. 2019).- El Sínodo constituye una "esperanza" para los indígenas, ya que hasta ahora "no hemos sido escuchados", dijo Delio Siticonatzi Camaiteri, miembro del pueblo Ashaninca (Perú), según informa Vatican News.

Estas declaraciones fueron realizadas durante el briefing sobre los trabajos del Sínodo Amazónico de hoy, 24 de octubre de 2019.

En él han intervenido el cardenal Beniamino Stella, prefecto de la Congregación para el Clero; Mons. Alberto Taveira Corréa, arzobispo de Belém do Pará (Brasil); Eleazar López Hernández, sacerdote católico indígena perteneciente al pueblo zapoteca (México); sor Mariluce dos Santos Mesquita, religiosa perteneciente a la etnia Barassana (Brasil); y el propio Delio Siticonatzi Camaiteri.

 

El centro es Jesucristo

Ante la pregunta planteada sobre la posibilidad de un rito amazónico común, el citado miembro del pueblo Ashaninca, compartió su percepción sobre la respuesta recibida con la propuesta: "Desde aquí les veo un poco inquietos, que no entienden lo que la Amazonía necesita. Nosotros tenemos nuestra cosmovisión, nuestra forma de ver el mundo que nos rodea. Y nos acerca más a Dios, la naturaleza. Nos acerca a mirar el rostro de Dios en nuestra cultura, en vivencia. Porque nosotros como indígenas, vivimos la armonía con todos los seres que hay allí. Veo que no les cuadra la idea de nosotros como indígenas. Los veo preocupados, dudosos frente a esta realidad que buscamos como indígenas".

También pidió: "No endurezcan su corazón, suavicen el corazón, es a lo que nos invita Jesús: que vivamos juntos. Creamos en un solo Dios, al finalizar todo ello vamos a estar unidos. Esto es lo que deseamos como indígenas".

"¿Tenemos nuestros ritos? Sí, tenemos nuestros ritos, pero este rito debe incorporarse al centro que es Jesucristo. No hay otra cosa que discutir sobre este tema. El centro que nos une en este Sínodo es Jesucristo", reiteró.

Por otro lado, Siticonatzi resaltó que los indígenas son asesinados "porque creen que no tenemos derechos". Ante esta realidad, efectivamente, para él, este Sínodo constituye un lugar esperanzador, pues constituye un espacio de diálogo y encuentro para defender la Amazonía y no solo para el Amazonas, sino para todo el mundo.

 

Camino conjunto

Por su parte, de acuerdo al medio vaticano, al ser cuestionado sobre las expectativas que el Sínodo le suscitaban, Mons. Alberto Taveira Corréa, arzobispo de Belém do Pará, Brasil, remarcó: "No estamos aquí como si hubiese una lista de deseos o decisiones que deben ser tomadas en la dirección que yo u otras personas puedan querer".

No obstante, señaló que sí "estamos aquí para hacer un camino juntos y tratar de ponerlo en las manos del Santo Padre". "Tengo mucha confianza, tengo grandes esperanzas", declaró.

 

Celibato

El cardenal Beniamino Stella, prefecto de la Congregación para el Clero, habló sobre el don del celibato y lo definió como la "gran belleza de la vida de un sacerdote", un "tesoro" que debe protegerse, pues se encierra "en vasijas de barro".

Efectivamente, lo describió como un "don de Dios, que debe ser acogido" y aludió a que "la Iglesia ha sido la única institución que predica un compromiso para siempre: para los sacerdotes, la vida consagrada y el matrimonio".

"El don del celibato representa hoy un gran desafío personal para los jóvenes y también para los sacerdotes", confirmó el prelado.

 

Oración, disciplina y compromiso

Igualmente, el prefecto de la Congregación para el Clero enumeró "la oración, la disciplina y el compromiso personal" como los tres requisitos para vivir el celibato, resaltando que es necesario "hablar a los jóvenes y presentarles las exigencias del sacerdocio latino como un gran compromiso y una gran belleza".

Para que sea aceptada, esta vocación exige "el equilibrio de una mente sana y una afectividad transparente", afirmó.

Y concluyó que "lo que el Sínodo podrá decir sobre los nuevos caminos del ministerio lo dejamos al discernimiento de los padres sinodales y al discernimiento final del Santo Padre".

 

Rito Amazónico

Con respecto a la sugerencia del rito Amazónico, el cardenal Stella considera que "es natural" que una iniciativa así surja en esta Asamblea Especial, pues "los pueblos amazónicos sienten la necesidad de poder comunicarse con su lengua, sus símbolos y sus rituales locales".

"La Amazonía es una realidad multiétnica y multilingüe, compuesta por cientos de grupos étnicos y cientos de idiomas. Hay una expectativa en esta materia y también una necesidad concreta: veremos lo que dirá el Sínodo", agregó.

 

Espiritualidad indígena

Eleazar López Hernández, sacerdote indígena católico perteneciente al pueblo zapoteca (México) manifestó el deseo de los pueblos autóctono de "poder expresar nuestra fe en nuestra cultura y en nuestra lengua". Y añadió que la Iglesia "necesita generar rostros concretos a los que llegue una propuesta cristiana".

Finalmente, la hermana Mariluce dos Santos Mesquita, centró su discurso en la espiritualidad indígena: "El Papa Francisco está escuchando y proponiendo reconocer, profundizar la espiritualidad indígena interactuando con la Palabra de Dios, que ya predicamos".

 

 

 

24/10/2019-17:28
Redacción

Ecuador: El episcopado se reúne con el gobierno para actuar como mediador

(ZENIT — 24 oct. 2019).- Ayer, miércoles 23 de octubre, cuatro representantes de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) acudieron a la sede del gobierno para actuar como mediadores en el conflicto nacional producido a principios de octubre.

Así lo ha comunicado hoy, 24 de octubre de 2019, la agencia de noticias Fides.

 

Antecedentes

El presidente de Ecuador Lenín Moreno, se ha reunido en varias sesiones con representantes de grupos sociales y sindicatos, especialmente de transporte, para definir las modalidades y fechas de los subsidios a la gasolina, el asunto que desencadenó las protestas hace unas semanas.

Las manifestaciones terminaron el 13 de octubre, tras la abrogación por parte del gobierno del polémico decreto sobre subsidios. Estas se saldaron con un total 8 víctimas mortales, más de 1.300 heridos y mil arrestos, según un informe de la Defensoria del Pueblo.

Al final de las protestas se abrió un diálogo directo entre el gobierno y el movimiento indígena, con la mediación del Episcopado y la oficina de las Naciones Unidas en Ecuador.

 

Delegación de la CEE

La delegación estaba formada por Mons. Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil, vicepresidente de la Conferencia Episcopal; Mons. Alfredo Espinosa, arzobispo de Quito; Mons. René Coba, ordinario militar, secretario de la CEE, y Mons. Danilo Echeverría, auxiliar de Quito, representante del sector familiar de la CEE.

El presidente de la CEE, por su parte, se encuentra actualmente en Roma, participando en el Sínodo de los Obispos.

 

Agradecimiento del presidente

De acuerdo a la citada fuente, la reunión se llevó a cabo a puerta cerrada, pero se divulgó información a la prensa. Así, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, agradeció a los obispos "en nombre del país, el Estado y el Gobierno" por la función mediadora ejercida en estos momentos difíciles, consecuencia de malentendidos y falta de diálogo.

Después, el dirigente habló de la "arrogancia de aquellos que creen que tienen derecho a permanecer indefinidamente en el poder, o en una posición intransigente", refiriéndose a lo sucedido en el país y a su retroceso en las disposiciones del gobierno.

Además, Moreno Lenín agradeció especialmente al Frente Único de Trabajadores (FUT) por haber suspendido la marcha programada para el 30 de octubre.

 

Palabras de Mons. Cabrera

Por otro lado, Mons. Cabrera subrayó la invitación del gobierno a la Conferencia Episcopal para trabajar como mediadora en el diálogo con el movimiento indígena del país, expone la nota enviada a Fides.

Asimismo, insistió en que "existe la disposición y la esperanza de llegar a acuerdos específicos, no para complacer a los grupos en diálogo, sino a todo el país".

Finalmente, el vicepresidente de la CEE concluyó su discurso anunciando el desafío de iniciar un proceso de reconciliación y pacificación porque "una parte del pueblo ha quedado fragmentada y herida".

 

 

 

24/10/2019-10:59
Larissa I. López

Secretaría de Estado: El Papa nombra al consejero de Asuntos Generales

(ZENIT — 24 oct. 2019).- El Santo Padre ha nombrado como consejero de Asuntos Generales de la Secretaría de Estado al Reverendo Mons. Luigi Roberto Cona, consejero de la Nunciatura Apostólica en Italia.

El Papa Francisco también ha nombrado como subsecretario de la Sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado a Mons. Mirosław Stanisław Wachowski, consejero de la Nunciatura en la misma Sección para las Relaciones con los Estados.

Así lo ha informado hoy, 24 de octubre de 2019, la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

 

Monseñor Luigi Roberto Cona

Nacido en Niscemi, Caltanissetta, Italia, el 10 de noviembre de 1965, fue ordenado sacerdote el 28 de abril de 1990, incardinado en Piazza Armerina.

Licenciado en Teología Dogmática, ingresó en el servicio diplomático de la Santa Sede el 1 de julio de 2003 y ha prestado servicio en las Representaciones Pontificias de Panamá, Portugal, Camerún, Marruecos, Jordania y Turquía; en la Sección de Asuntos Generales de la Secretaría de Estado y en la Nunciatura Apostólica de Italia.

Habla español, inglés, portugués y francés.

 

Mons. Mirosław Stanisław Wachowski

Nacido en Pisz (Polonia), el 8 de mayo de 1970. Fue ordenado sacerdote el 15 de junio de 1996, incardinándose en Ełk (Polonia).

Licenciado en Derecho Canónico, ingresó en el servicio diplomático de la Santa Sede el 1 de julio de 2004 y ha prestado servicio en las Representaciones Pontificias en Senegal, en las Organizaciones Internacionales de Viena, Polonia y en la Sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado.

Habla italiano, inglés, francés y ruso.

 

 

 

24/10/2019-09:46
Larissa I. López

Card. Ravasi: La Biblia, "horizonte ideal" para la cultura occidental

(ZENIT — 24 oct. 2019).- "La Biblia ha sido para la cultura occidental el horizonte artístico, literario, ético e ideal al cual la investigación humana se ha dirigido durante siglos como punto de referencia". Así lo declaró el cardenal Gianfranco Ravasi en la Universidad de Navarra, durante la conferencia de clausura del XXXVI Simposio Internacional de Teología. Centrado en 'La Biblia, lengua materna del mundo actual', el encuentro reunió a un centenar de expertos de diferentes países.

El cardenal Ravasi, presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, impartió una conferencia bajo el título "La Biblia en el atrio de la cultura", en la que relató la importancia del atrio, espacio abierto entre el área sagrada del templo y la profana de la plaza, para establecer un encuentro neutral entre dos mundos, el religioso y el laico.

Señaló que "la Biblia, en su totalidad de palabra divina y palabras humanas, entra en el atrio de la sociedad, de la historia y de la cultura como una presencia que puede fecundar los terrenos áridos de la humanidad y que, al mismo tiempo, puede ser una espada que hiere la superficialidad y la indiferencia, haciendo temblar los corazones y las mentes, exigiendo escucha".

En su mensaje testimonió de una manera muy esencial la incidencia que ha tenido la Biblia en la manifestación concreta de la belleza, dentro de la historia de la cultura occidental. Para ello recordó palabras de san Juan Damasceno, quien animaba a los no creyentes, deseosos de conocer la fe cristiana, no a entablar un debate teológico, sino a entrar en una Iglesia y contemplar las pinturas y las estatuas presentes.

Asimismo, recordó las afirmaciones de san Juan Pablo II en su famosa Carta a los artistas, en la Pascua de 1999, en las que decía que el texto bíblico ha inspirado la imaginación de pintores, poetas, músicos, personas del teatro y de cine: "La Biblia innumerables veces se ha hecho imagen, música o poesía, evocando con el lenguaje del arte el misterio del verbo hecho carne".

 

El Simposio

A lo largo de tres jornadas se celebraron dos mesas redondas y ocho ponencias. La primera de las mesas redondas se centró en "La Biblia en la cultura popular. Intervinieron Alfonso Méndiz (Universidad Internacional de Cataluña); Guadalupe Seijas (Universidad Complutense de Madrid); y Miguel Ángel Berlanga (Universidad de Granada).

La segunda mesa redonda versó sobre "La Biblia en la configuración de la sociedad". Intervinieron el profesor Sergio Tapia Velasco (Pontificia Universidad de la Santa Cruz, Roma); el profesor Fernando Simón (Universidad de Navarra); y el profesor Ricardo Calleja (IESE Business School).

Las ponencias corrieron a cargo de Luis Galván (Universidad de Navarra); Ruth Fine (Universidad Hebrea de Jerusalén); Diego Pérez Gondar (Universidad de Navarra); Nicolás Álvarez de las Asturias (Universidad San Dámaso de Madrid); Agustín González Enciso (Universidad de Navarra); Armand Puig i Tárrech (Ateneu Universitari Sant Pació); Ricardo Piñero (Universidad de Navarra); y del cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo pontificio para la Cultura, quien clausuró el Simposio.

 

 

 

24/10/2019-11:10
Redacción

Academia de las Ciencias: Frances H. Arnold, nombrada miembro titular

(ZENIT — 24 oct. 2019).- El Papa Francisco ha nombrado como miembro titular de la Academia Pontificia de Ciencias a la profesora Frances Hamilton Arnold (Estados Unidos), docente de Ingeniería Química, Bioingeniería y Bioquímica en el Instituto de Tecnología de California en Pasadena.

Así lo ha informado hoy, 24 de octubre de 2019, la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

 

Prof. Frances Hamilton Arnold

Nació en Pittsburgh, Pennsylvania (Estados Unidos) el 25 de julio de 1956. Es licenciada en Ingeniería Mecánica y Aeroespacial por la Universidad de Princeton en 1979 y doctora en Ingeniería Química por la Universidad de California en Berkeley en 1985.

Actualmente es Linus Pauling Professor de Ingeniería Química, Bioingeniería y Bioquímica en el Instituto Tecnológico de California en Pasadena, donde ha enseñado desde 1986.

Por su innovadora investigación sobre métodos de evolución directa para producir nuevas enzimas en el laboratorio, recibió el Millennium Technology Prize en 2016 y el Premio Nobel de Química en 2018.

Es cofundadora de Gevo, Inc. una empresa que produce combustibles y productos químicos a partir de fuentes renovables.

 

 

 

24/10/2019-07:02
Enrique Díaz Díaz

Monseñor Enrique Díaz Díaz: "¿Fariseos?"

 

Eclesiástico 35, 15-17. 20-22: "La oración del humilde llega hasta el cielo"
Salmo 33: "El Señor no está lejos de sus fieles"
II Timoteo 4, 6-8. 16-18: "Ahora sólo espero la corona merecida"
San Lucas 18, 9-14: "El publicano regresó a su casa justificado y el fariseo no".

No es raro encontrarnos con personas que se creen perfectas y que se colocan como centro del universo. Lo triste de la situación es que mientras para todos los demás aparece evidente su poco valor, ellos no son capaces de darse cuenta. Cristo reconoce que estos personajes sufren una grave distorsión de la realidad y que con sus actitudes se cierran puertas a la misericordia y también a la relación con los demás. Por eso, recurre a los ejemplos y a las parábolas para hacernos reflexionar. Un publicano engreído y orgulloso que desprecia a los demás y que se pone como justo delante de Dios. A los ojos de todos evidentemente queda en ridículo, pero él se da cuenta.

¿Fariseos nosotros? Quizás digamos que esta parábola no tiene nada de actual, pero es dolorosamente actualizada por muchos de nosotros. Creyéndonos justos, nos apoyamos en nuestro orgullo, en nuestra religión y en nuestras posiciones para mirar a los demás como inferiores, despreciarlos, juzgarlos y condenarlos. Muchos de los conflictos actuales a nivel local y a nivel mundial, no son otra cosa que la prepotencia de quien se siente dueño del mundo, que utiliza a Dios y a la religión para sentirse satisfecho y para aprovecharse de los demás. Hay quienes pagan hasta la última veladora al Señor, pero no tienen empacho en despojar al pobre, "legalmente", de sus tierras, de su agua y de su casa y ¡no se sienten ladrones! Hay quienes embriagan con sus licores, sus drogas y sus mentiras a jóvenes incautos y después los condenan por borrachos y flojos; en cambio ellos se sienten muy dignos.

El fariseo hace toda una presentación de sí mismo, pero ¡siempre diciendo lo que no es! "no soy como los demás hombres: ladrones, injustos y adúlteros; tampoco soy como ese publicano", sabe muy bien lo que no es, pero no sabe lo que sí es, ni lo que hay en su interior. Y cuando intenta describir a su persona, viene decir: "ayuno dos veces por semana y pago el diezmo de todas mis ganancias", como si todo su valor dependiera del dinero o de lo que se come. Pero, ¿quién es en realidad? Jesús viene a trastocar el orden establecido por el sistema judío y si miramos las cosas con detenimiento, también viene a trastocar todo nuestro sistema. No importa lo exterior, sino lo que hay realmente en el interior. Parecería que el hombre moderno está lleno de materialismo, de comparaciones, de competencia feroz contra los demás. Que vale solo por lo que tiene. Se llena de todo y no deja lugar para experimentar dentro de si mismo el gran amor de Dios. El pecado del fariseo y de nuestro mundo, es reducirlo todo a comercio, a vanidad, a orgullo y no dejar espacio ni para Dios ni para el prójimo.

La primera lectura de este domingo nos enseña que Dios no cabe en ese mundo de comercialización y de intercambio, por el contrario declara abiertamente quiénes son los predilectos de Dios. Dios tiene un afecto y una debilidad especial por los pobres y humildes. "El Señor es un juez que no se deja impresionar por apariencias. No menosprecia a nadie por ser pobre y escucha las súplicas del oprimido. No desoye los gritos angustiosos del huérfano ni las quejas insistentes de la viuda." (Ecclo 35,15-17). ¡Cómo quisiéramos que hoy esto también fuera realidad! Que los jueces, que las autoridades, no se dejen impresionar por las apariencias, que no menosprecien a nadie, que escuchen las súplicas de un pueblo que se muere de hambre, no logra superar los límites extremos de la pobreza y que no sabe a quien clamar justicia.

Al reflexionar sobre la parábola nos debe quedar muy claro: no es que Jesús esté de acuerdo con el pecado o se haga de la vista gorda ante el mal. Los publicanos o, como algunos lo traducen, los recaudadores de impuestos, eran tenidos por el pueblo como traidores y los rechazaban porque vivían a costa de los sufrimientos del pueblo. Jesús no está de acuerdo con la injusticia, pero cuando encuentra la conversión, cuando encuentra un corazón dispuesto, da la salvación, por eso termina su narración diciendo: "pues bien, yo les aseguro que éste bajo a su casa justificado y aquél no; porque todo el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido". Sólo el que está vacío de sí mismo puede llenarse de Dios. Sólo quien tiene espacio en su corazón puede recibir a sus hermanos.

La parábola de Jesús nos lleva a examinarnos seriamente cómo es nuestra actitud. Detrás de los dos personajes se puede descubrir la oposición entre dos tipos de justicia: la del hombre que cree que es capaz de alcanzarla cumpliendo la exterioridad de la ley; o la justificación que Dios concede al pecador que se reconoce como tal y se convierte. A un corazón cerrado y atiborrado de orgullo, no puede entrar ni el hermano ni Dios.

Por eso en su oración, llevando la contraria al publicano, Mazariegos y Botana, exclamaban:

Señor, me siento perdido. Tú dices que es inútil que madrugue, que es inútil que me acueste tarde, que es inútil que coma el pan de la fatiga. Tú dices: ¡que lo das a tus amigos mientras duermen! Quiero ser tu amigo y nada exigirte. Quiero ser tu amigo y vivir de tu gratuidad. Quiero ser tu amigo y aceptar tu salvación. Quiero ser tu amigo y dejarme querer por ti. Tus dones, Señor, son la riqueza de mi corazón. Tu gracia en mí, es tu vida sin término... Oh Dios, Dios gratuito. Dios del pobre, del que desde su barro, busca todo de su gracia. Amén.

 

 

 

24/10/2019-06:50
Isabel Orellana Vilches

San Bernardo Calbó, 25 de octubre

«Abad cisterciense español. Obispo de Vic. Un jurista errante en el camino de su profesión, que fue sorprendido por la enfermedad, y viendo en ello la mano de Dios mudó por completo su conducta y le entregó su vida»

Era español, hijo de uno de los caballeros que rescató Tarragona de manos de los infieles, y se estableció en esa región en la época de la Reconquista; por tanto, Bernardo pertenecía a una familia de relevancia social. Nació en 1180 y fue el tercero de cinco hijos, tres hermanos y una hermana. Creció en la masía de Calbó, y cuando llegó la hora de orientar su futuro profesional se decantó por las leyes. Posiblemente estudió esta carrera en la universidad de Bolonia, como hizo san Raimundo de Peñafort, contemporáneo suyo, aunque los datos de esta etapa de su vida no han podido ser contrastados con rigor por parte de los hagiógrafos. En 1209 se le sitúa en Tarragona, asistiendo jurídica y administrativamente al arzobispado. Su quehacer en esa época pudo no estar guiado por el juicio de Dios y sí por el de esa clase de hombres que no tienen consideraciones a la hora de proceder. Hasta que una grave enfermedad le dio un toque de alerta definitivo alrededor de sus 30 años.

Vislumbrando la voluntad de Dios, y fallecido ya su padre, con la salud recobrada en 1215 se unió a la comunidad cisterciense de Santes Creus, Tarragona. Dio este paso en contra del parecer de los suyos, que es el signo compartido por quienes sintiéndose llamados por Dios se deciden a seguirle afrontando el veto que en sus propios hogares pueden querer imponerles. Ha sido frecuente en todas las épocas de la historia que los más cercanos se dispongan a dar su beneplácito a los hijos si la vía del matrimonio es la elegida, pero no han sido siempre tan benévolos cuando éstos piensan establecer su compromiso con Dios. Toda la apertura, la comprensión y aceptación —a veces de lo objetivamente dañino—, que tantos jóvenes reciben hoy día de sus progenitores, se torna en intransigencia en no pocas ocasiones cuando se trata de dar alas a la vocación religiosa.

En su propio tiempo, Bernando, haciendo caso omiso del juicio negativo que su decisión había suscitado en sus parientes, al integrarse en el monasterio generosamente legó sus pertenencias a su madre y al resto de su familia en un testamento redactado ese mismo año 1215 que revocaba otro anterior. Extrayendo el néctar de la regla cisterciense, fiel al evangelio, hizo de la caridad el hilo conductor de su entrega, única vía para alcanzar la unión con las Personas Divinas. Era bien conocido por los tarraconenses por tratarse de uno de los canónigos de la catedral, elegido también su vicario. Durante doce años de austeridad, oración y penitencia, aquilató su donación en el convento. Fueron sus edificantes virtudes las que se tuvieron en cuenta en el momento en que se planteó la sucesión del abad Ramón cuando éste falleció. Nadie dudó de que Bernardo sería el idóneo para proseguir manteniendo el espíritu observante del monasterio. Y en torno a 1225 asumió esta responsabilidad.

Su labor apostólica no se limitó a la formación de los monjes, sino que fue director espiritual de las religiosas cistercienses de Valldonzella. Esta comunidad se había establecido en Santa Creu d'Olorde en las cercanías de Vallvidrera y quedaron sujetas (fueron donadas) por iniciativa del obispo de Barcelona, Berenguer de Palou, quien las puso bajo la tutela de la Orden del Císter, dependiente del monasterio de Santes Creus. El abad Bernardo fue cofundador de esta comunidad que bajo su amparo vivió una época de gran florecimiento apostólico. También contribuyó a mantener vivo el espíritu reformador de la abadía cisterciense de Ager, Lérida.

En esta época de reconquista, dos figuras señeras de la historia mallorquina, Ramón y Guillermo de Montcada, muy estimados por el rey Jaime I el Conquistador, se disponían a partir a Mallorca para rescatarla. Antes se despidieron del abad Bernardo y se sintieron confortados con su consejo y aliento. Ambos murieron en la batalla de Porto Pi, y a Bernardo le tocó dar cristiana sepultura a sus restos en el monasterio de Santes Creus. En 1230 integró el grupo de electores, entre los que se hallaba san Raimundo de Peñafort, y unidos al arzobispo de Tarragona designaron al obispo de la reconquistada Mallorca. Entre tanto, los rasgos de su piedad y caridad se prodigaban dentro y fuera de la comunidad. Manifestaba una predilección por los enfermos.

Cuando el prelado Guillermo de Tavertet dejó vacante la sede de Vic, Bernardo fue elegido para sucederle dada su trayectoria espiritual y apostólica. A su esmerada formación teológica se unía la prudencia, discreción y exquisitez en el trato. Asumir este oficio supuso para él una contrariedad. Su vocación se hallaba en el silencio del claustro. Pero convencido de que el nombramiento obedecía a la voluntad divina, lo acogió e implantó el espíritu monástico en la sede episcopal. Convivió junto a una comunidad de cuatro monjes que le acompañaron hasta su muerte secundándole en todas las tareas de su ministerio que, naturalmente, tenían el signo de la auténtica consagración. Bernardo fue un insigne Pastor que veló por la liturgia y por la formación de los sacerdotes. Fue enérgico y exigente con su forma de vida. Se distinguió también por la modestia, la generosidad, la bondad, y la caridad. En el ejercicio de su misión llevó consigo la reconciliación y la paz.

El papa Gregorio IX, conocedor de sus virtudes y valía pastoral, pensó en él para luchar contra los valdenses designándole inquisidor en 1232. El santo monje luchó contra los albigenses, y se implicó en la guerra de Valencia firmando la capitulación en 1238. Por su valor fue recompensado por el rey Jaime I. En 1239 y en 1243 participó en sendos concilios provinciales. El 26 de octubre de este último año entregó su alma a Dios con fama de santidad. Antes de cumplirse seis meses de su muerte su vida comenzó a ser examinada por una comisión de canónigos. En 1338 se abrió el proceso de su canonización. Clemente XI en un breve apostólico fijó la fecha de su celebración dentro del císter el 26 de septiembre de 1710.