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EL TIEMPO PONE A CADA PERSONA EN SU SITIO

 

Gervasio Portilla | 17.03.2016


La   verdad es que los seres humanos deberíamos tomar perspectiva sobre las cosas y dar tiempo y distancia a la hora de juzgar a las personas, aunque no es fácil.

Eso es lo que está pasando con Felipe González, su imagen con el paso del tiempo se está agigantando y creo con justicia.

Nadie es perfecto y en sus mandatos como en todos hubo claros y oscuros, pero muchos más claros.

Recordemos algunos: reconversión industrial, con toda la problemática que dio la industria naval, negociaciones con la entonces Comunidad Económica Europea, en un momento decisivo para España; la rectificación sobre la OTAN, reconociendo un error en su oferta electoral;  respeto a la oposición con la creación de la figura del jefe de la oposición; acuerdo con la Iglesia muy positivos para todos; en definitiva, una persona con los pies en el suelo.

Ahora, está diciendo verdades como puños, al defender a la oposición venezolana y denunciando de forma continua y valiente los atropellos de los derechos humanos del régimen chavista.

Necesitamos a izquierda y derecha muchos políticos de la talla de Felipe González; pero de verdad es que ni  buscándolo con un candil lo encontramos.

 

Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista