Amor
Anticoncepción: el método natural en cuestión
El método natural de control de la natalidad es una elección responsable que consiste en adaptar el comportamiento y la sexualidad al ritmo de la propia fertilidad.
11 ene 2022, 23:00 | La Croix
¿Qué entendemos por métodos naturales?
"Natural" aquí no significa en absoluto "dejar a la naturaleza y confiar en la providencia". La Organización Mundial de la Salud las define como técnicas de planificación de la natalidad vinculadas a la observación de los signos de fertilidad o infertilidad en el ciclo femenino. Cuando se utilizan para evitar un parto, implican la abstinencia sexual durante la fase fértil.
"Natural" significa de acuerdo con la naturaleza profunda del ser humano y del acto sexual, un acto de amor y procreación. Pero estar abierto a la posibilidad de concebir un hijo no significa elegir un método poco eficaz... Por el contrario, es una elección responsable que consiste en adaptar el comportamiento y la sexualidad al ritmo de la propia fertilidad.
¿Son fiables estos métodos?
Existe un prejuicio contra los métodos naturales, ya que la gente suele referirse al método Ogino. Este método, basado en un cálculo de probabilidades, era efectivamente poco fiable. El método de autoobservación se basa en la observación diaria de los signos de fertilidad de la mujer: un estudio científico de 700 parejas, publicado en 1998, demostró que era muy fiable.
Sin embargo, cuando se trata de la anticoncepción, siempre hay que distinguir entre la eficacia teórica y la eficacia práctica. Por ejemplo, la píldora es una técnica muy fiable, pero si te olvidas de tomarla... Aquí, es lo mismo. Este método natural es muy fiable siempre que se sigan estrictamente las instrucciones.
Autoobservación y continencia
Este método se basa en la observación de tres signos, que indican el periodo fértil o no fértil: el moco cervical, la temperatura y los cambios en el cuello uterino.
Este método es algo diferente del método Billings, que se basa en la observación de un solo signo (el primero mencionado).
Una pareja que no quiera tener hijos optará por mantener relaciones sexuales fuera de los periodos fértiles. A la inversa, este método también puede ayudar a las parejas que tienen dificultades para tener hijos a identificar los periodos más fértiles.
¿Significa esto períodos de continencia?
Sí, y es cierto que esto no está muy "de moda" en la sociedad actual. Pero la continencia puede ser bien vivida si se elige y no se sufre.
Si se elige, aumentará la unidad de la pareja. Puede enriquecer la vida afectiva de la pareja desarrollando gestos de ternura cuyo objetivo no es la unión sexual. Estimula el deseo y da sabor a los encuentros.
Pero estos periodos de continencia no siempre son fáciles de vivir, por lo que requieren un verdadero diálogo. Como en la vida de la pareja en su conjunto, no todo es siempre evidente: es un camino, lleva tiempo. La feminista Françoise Edmonde Morin escribió en su libro La rouge différence: "Cuando se practica con una fuerte motivación, la abstinencia no es motivo de angustia ni de miseria moral. Es un momento para el cuerpo. Cada mes se renueva la elección de procrear o no, sin hacer violencia al cuerpo. El cuerpo no debe estar constantemente a disposición del deseo sexual. La fertilidad también debe tener su lugar. La elección es precisamente esta: alternar los momentos del cuerpo o someterlo por completo a un único impulso. Sexualidad y sexualidad, o sexualidad y fertilidad".