Respetar la dignidad de las personas migrantes

 

 

Miércoles 09 septiembre, 2020


 

 

 

 

 

El Papa Francisco ha dedicado su mensaje para la Jornada Mundial del Emigrante y Refugiado a los desplazados internos, un drama a menudo invisible que la crisis mundial causada por la pandemia de la Covid-19 ha agravado. La Iglesia española quiere secundar las directrices del Papa Francisco como directrices generales, en materia de migración, a pesar de que en España no existen propiamente “desplazados internos”.

Con motivo de esta jornada, los obispos de la Subcomisión de Migraciones y Movilidad han publicado un mensaje, en el que caben destacar 3 puntos fundamentales:

 

  • Asegurar los derechos de toda persona obligada a desplazarse

    Los obispos españoles piden poner rostros a todas estas personas vulnerables, ya que, no son cifras, son personas. Se trata de sensibilizar a la comunidad cristiana que reconoce a Jesús en cada persona obligada a huir.

     
  • Adoptar medidas que respeten la dignidad de los migrantes

    El futuro, señalan los obispos, va a suponer una dificultad mayor, entre otras causas, por los nuevos problemas en las fronteras y por el riesgo de que se produzcan situaciones de expulsión de migrantes. Por eso, piden a las instituciones de la Iglesia trabajar en red, uniéndose al esfuerzo de las otras instituciones de la sociedad civil.

     
  • Conjugar nuevos verbos

    Por último, piden conjugar los nuevos verbos propuestos por el Papa: “Acercarnos como prójimos” ; “Escuchar” el grito de los más vulnerables, de los desplazados; “Compartir”, para crecer juntos, sin dejar fuera a nadie; “Involucrar”, porque solo con la colaboración de todos es posible encarar la crisis y “Colaborar” porque este no es el tiempo del egoísmo, porque el desafío que afrontamos nos une a todos y no hace acepción de personas.