Servicio diario - 06 de septiembre de 2017


Programa del viaje del papa Francisco a Colombia
Redacción

El Papa parte hacia Colombia
Redacción

Viaje a Colombia: el Papa en el vuelo pide oraciones por Venezuela
Redacción

Francisco ya está en Colombia
Redacción

Miles saludan al Papa en el trayecto hasta la Nunciatura
Redacción

Calurosa bienvenida al Papa en el aeropuerto El Dorado
Redacción

Francisco llega a la Nunciatura, donde le reciben con cantos y bailes
Redacción

El Santo Padre antes de viajar saluda a dos familias que perdieron todo
Rosa Die Alcolea

Fallece el cardenal Carlo Caffarra, Arzobispo emérito de Bolonia
Redacción

P. Antonio Rivero, L.C. “Si tu hermano peca, no dejes de amarle: ayúdale”
Antonio Rivero

“Ya no hay pobres”, por Mons. Felipe Arizmendi
Felipe Arizmendi Esquivel

Beata Eugenia Picco – 7 de septiembre
Isabel Orellana Vilches


 

06/09/2017-07:00
Redacción

Programa del viaje del papa Francisco a Colombia

Miércoles 6 de septiembre de 2017 ROMA-BOGOTÁ

11.00 Salida en avión desde el aeropuerto de Roma/Fiumicino hacia Bogotá (12,30 hs. de vuelo)
16.30 Llegada en el área militar (CATAM) del aeropuerto de Bogotá – ( Hora en Roma 23:30) Ceremonia de bienvenida – A la nunciatura apostólica (15 km.)

 

Jueves 7 de septiembre de 2017 – BOGOTÁ

TEMA: artesanos de paz, promotores de la vida

9.00 Encuentro con las autoridades en la Plaza de Armas de la Casa de Nariño – (En Roma 16:00)
9.30 Visita de cortesía al Presidente en el Salón Protocolario de la Casa de Nariño. (En Roma 16:30)
10.20 Visita a la Catedral – (En Roma 17:20)
10.40 Bendición a los fieles desde el balcón del Palacio Cardenalicio .- (En Roma 17:40)
11.00 Encuentro con los obispos (unos 130) en el salón del Palacio Cardenalicio .- (En Roma 18:00)
15.00 Encuentro con el Comité directivo del CELAM en la Nunciatura Apostólica .- (En Roma 22:00)
15.45 Santa Misa en el Parque Simón Bolívar .- (En Roma 22:45) (en auto a 6 km)
16:00 Llegada al Parque en papamóvil y saludo a los fieles – (En Roma 23:00)
16:30 Santa misa (En Roma 23:30)
18:45 Ida a la Nunciatura Apostólica. Cena privada y bendición de niños, ancianos y personas con discapacidad

 

Viernes 8 de septiembre de 2017 – BOGOTÁ-VILLAVICENCIO-BOGOTÁ

TEMA: La reconciliación, con Dios, con los colombianos y con la naturaleza

7.20 Salida en avión desde base área militar (CATAMA) de Bogotá hacia Villavicencio (90 Km) – (En Roma 14:20)
8.30 Llegada a la Base Aérea de Apiay, en Villavicencio (En Roma 15:30)
9.30 CATAMA – Saludo a los fieles en papamóvil y santa Misa (a 9,5 km del aeropuerto)
– Beatificación de Mons. Jaramillo y del padre Pedro Ramirez Ramos – (En Roma 16:30)
15.40 Gran encuentro de oración por la reconciliación nacional en el Parque Las Malocas – (En Roma 22:30)
17.20 Parada en la Cruz de la reconciliación en el Parque de los Fundadores – (En Roma 00:20)
18.00 Salida en avión hacia Bogotá – (En Roma 01:00)
18.45 Llegada al área militar (CATAM) del aeropuerto de Bogotá – (En Roma 01:45)
19.15 Llegada a la Nunciatura Apostólica – (En Roma 02:15)

 

Sábado 9 de septiembre de 2017 – BOGOTÁ-MEDELLÍN-BOGOTÁ

TEMA: la vida cristiana como discipulado

8.20 Salida en avión desde el área militar (CATAM) del aeropuerto de Bogotá hacia Rionegro – (En Roma 15:20)
9.10 Llegada a la Base Aérea de Rionegro – (En Roma 16:10)
9.15 Traslado en helicóptero al aeropuerto de Medellín – (En Roma 16:15)
10.15 Santa Misa en el aeropuerto Enrique Olaya Herrera de Medellín – (En Roma 17:15)
15.00 Encuentro en el Hogar San José – (En Roma 22:00)
16.00 Encuentro con sacerdotes, religiosos/as, consagrados/as, seminaristas y sus familias de procedencia en La Macarena – (En Roma 23:00)
Traslado en helicóptero a la Base Aérea de Rionegro
17.30 Salida en avión hacia Bogotá – (En Roma 00:30)
18.25 Llegada al área militar (CATAM) del aeropuerto de Bogotá – (En Roma 01:25)
18:50 Llegada a la Nunciatura Apostólica – (En Roma 01:50)

 

Domingo 10 de septiembre de 2017 – BOGOTÁ-CARTAGENA

TEMA: dignidad de la persona y derechos humanos

8.30 Salida en avión hacia Cartagena de Indias
10.00 Llegada al aeropuerto R. Nuñez, de Cartagena de Indias – (En Roma 17:00)
10.30 Bendición de la primera piedra de las casas para los sintecho y de la Obra Talitha Qum en
la Plaza San Francisco de Asís – (En Roma 17:30)
12.00 Ángelus en el atrio de San Pedro Claver – (En Roma 19:00)
12.15 Visita a la Casa Santuario de San Pedro Claver – (En Roma 19:15)
15.45 Traslado en helicóptero desde la Base Naval al área portuaria de Contecar – (En Roma
22:45)
16.30 Santa Misa en el área portuaria de Contecar – (En Roma 23:30)
18.30 Traslado en helicóptero al aeropuerto de Cartagena – (En Roma 01:30)
18.45 Ceremonia de despedida – (En Roma 01:45)
19.00 Salida en avión hacia el aeropuerto de Roma/Ciampino – (En Roma 02:00)

 

Lunes 11 de septiembre de 2017 – ROMA

12.40 Llegada al aeropuerto de Roma/Ciampino

 

 

06/09/2017-09:18
Redacción

El Papa parte hacia Colombia

(ZENIT – 6 Sept. 2017).- El papa Francisco se ha embarcado esta mañana en el aeropuerto romano Leonardo da Vinci, en Fiumicino, en un vuelo que partió a las 11 horas rumbo a Colombia, donde aterrizará en el área militar del aeropuerto de Bogotá a las 16:30 horas locales (23:30 horas de Roma).
Este es el 20º viaje apostólico internacional que realiza el papa Francisco en su pontificado. Está previsto que a su llegada a la capital de Colombia, se celebre una ceremonia de bienvenida en el mismo aeropuerto, donde le recibirán las autoridades civiles del país.
El avión en el que viaja el Papa es un AZ A330 de la compañía Alitalia y el recorrido del trayecto Roma-Bogotá es de 9.825 kilómetros, que recorrerá en 12 horas y 25 minutos, según lo previsto.
Durante el viaje el Santo Padre visitará cuatro ciudades y celebrará tres misas. El Papa regresa el domingo 10 por la noche en un vuelo de Avianca y llega a Roma el lunes, después del medio día.

 

Santa Fé de Bogotá

La Archidiócesis Santa Fé de Bogotá, donde llegará el papa Francisco, está dirigida por el arzobispo Rubén Salazar Gómez, que fue creado cardenal en 2012 por Benedicto XVI, sede del gobierno y sede de los consejos episcopales de América Latina y el Caribe (CELAM), instaurado por Pío XII después de la primera Asamblea General del Episcopado de la región en 1955, miércoles 6 de septiembre.
La CELAM es el órgano de coordinación eclesial que organizó las Conferencias
Generales de Medellín (1968), Puebla (1979), Santo Domingo (1992) y Aparecida (2007) ). El actual presidente de CELAM es el cardenal R. Salazar.

 

 

06/09/2017-15:32
Redacción

Viaje a Colombia: el Papa en el vuelo pide oraciones por Venezuela

(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 6 Sept. 2017).- El papa Francisco pidió oraciones por su
viaje a Colombia, para que el país vaya adelante en su camino de paz y solicitó también oraciones por Venezuela con cuyos obispos se reunirá.
Lo dijo al saludar a los periodistas al inicio del vuelo de Alitalia que partió este miércoles por la mañana desde Roma. El vuelo que le lleva a Colombia para una visita apostólica de cinco días llegará a Bogotá a las 16:30 locales (20:30 de Roma),
“Este viaje es un poco especial porque es un viaje para ayudar a Colombia a ir adelante en su camino de paz. Les pido también una oración por esto durante el viaje”, dijo el Sucesor de Pedro.
“Quisiera decir que durante este vuelo sobrevolaremos Venezuela y pedirles que recen
para que pueda haber un diálogo, para que el País encuentre una hermosa estabilidad y un diálogo con todos”.
Las manifestaciones en Venezuela en contra y a favor del gobierno de Nicolás Maduro, han causado en los últimos cinco meses más de 120 muertos. Además, según la ONG Foro Penal, más de 5.000 personas han sido detenidas.
La crisis política venezolana se agravó con la elección de una asamblea constituyente controlada por el ejecutivo, dotada de poderes casi ilimitados y que se arrogó las prerrogativas del parlamento actual, en manos de la oposición desde las últimas elecciones libres.
Por su parte la Conferencia Episcopal de Venezuela, en su cuenta twitter señalo que el “Papa Francisco recibirá a los obispos Venezolanos este jueves 07 de septiembre, después de la misa en Bogotá”.
Se indicó también que desde el avión se enviará un telegrama al presidente Nicolás Maduro, como se hace con todos los jefes de Estado de los países que sobrevuela el vuelo papal.
El avión además hará una pequeña desviación debido al huracán Irma que está azotando Centroamérica y que llegará a Florida (EEUU) este próximo sábado.

 

 

06/09/2017-21:25
Redacción

Francisco ya está en Colombia

(ZENIT – Roma, 6 Set. 2017).- Con algunos minutos de anticipación, el vuelo de Alitalia que llevó el papa Francisco a Colombia llegó a las 16:15 horas locales al Aeropuerto internacional El Dorado, en la ciudad de Bogotá. Mientras recorría la pista, desde la cabina del avión que fueron expuestas dos banderas, una del Vaticano y la otra de Colombia.
Una orquesta sinfónica amenizó con música clásica la espera, y un grupo de niños con chompas con escritas palabras como fe, paz, esperanza, caridad, le aguardaban para la bienvenida.

 

 

06/09/2017-21:50
Redacción

Miles saludan al Papa en el trayecto hasta la Nunciatura

(ZENIT – Roma, 6 Set. 2017).- Concluida la ceremonia de bienvenida en el Aeropuerto internacional El Dorado, el papa Francisco subió al papamóvil para dirigirse a la Nunciatura Apostólica.
El vehículo, una camioneta Chevrolet fue transformada en Colombia para ser usada como papamóvil. En su interior tiene una placa que dice: “Hecho con mucho cariño por manos colombianas” y un escudo del equipo San Lorenzo de Almagro, con el que el Papa simpatiza.
Los gestos y sencillez del Sucesor de Pedro, asombraron a muchos de los periodistas que comentaban el evento en directa. En el papamóvil subió también el cardenal Rubén Salazar, arzobispo de Bogotá.
El Santo Padre estuvo de pié durante todo el viaje, para saludar a quienes le aguardaban durante el recorrido de unos 15 kilómetros, miles de colombianos que estaban apostados desde hacía varias horas para saludar al Peregrino de paz, agitando banderas, pañuelos, y sacando fotos con los móviles.
En medio del alboroto general, la gente le arrojaba rosas, coreaban ‘Francisco’, incluso ciclistas le siguieron en una parte del recorrido por una paralela, hasta que en el tramo final, antes de llegar a la Nunciatura, el papamóvil redujo su velocidad a pedido del Papa que quería saludar a los presentes.
En la Nunciatura Apostólica el Santo Padre alojará durante las cuatro noches que pasará en Colombia.

 

 

06/09/2017-21:59
Redacción

Calurosa bienvenida al Papa en el aeropuerto El Dorado

(ZENIT – Roma, 6 Set. 2017).- El papa Francisco descendió del Airbus de Alitalia a las 16:35 locales por una escalera con alfombra roja.
El presidente colombiano Juan Manuel Santos y su consorte María Clemencia Rodríguez, con quienes conversó brevemente, así como el nuncio apostólico Ettore Balestrero y el cardenal primado de Colombia, Rubén Salazar.
Estaba allí presentes autoridades políticas, civiles, religiosas y unas mil personas. Un niño le entregó una paloma de paz, era Emmanuel, el hijo nacido en el cautiverio de Clara Rojas, política secuestrada por las FARC durante seis años.
Mientas la banda sinfónica amenizaba con el ‘Gloria’ de Vivaldi, el Pontífice saludó a un grupo de niños que vestían chompas con palabras como paz, justicia, esperanza, etc. El Papa le estrechó la mano también a unas veinte personas entre las cuales la ministra de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín.
Estaban también en las seis tribunas allí instaladas, víctimas del conflicto, militares y civiles, y religiosos de diversas órdenes, ancianos y enfermos, destacándose muchos militares en sillas de ruedas o lisiados. Incluso uno de ellos le acercó un frasco de agua y pidió que se lo bendijera, a lo que accedió el Santo Padre.
Dos grupos folclóricos amenizaron la llegada con unos bailes típicos del país, como “Yo me llamo cumbia”, con la alegría que le caracteriza.
Desde el aeropuerto en donde llegó después de más de 12 horas de viaje el Papa se transfirió en Papamóvil a Bogotá, a la sede de la Nunciatura Apostólica, donde pernoctará cuatro noches.

 

 

06/09/2017-21:57
Redacción

Francisco llega a la Nunciatura, donde le reciben con cantos y bailes

(ZENIT – Roma, 6 Sept. 2017).- Con el horario del programa un poco atrasado debido a la gran cantidad de gente que le esperaba en las inmediaciones de la Nunciatura en Bogotá, el papa Francisco llegó en papamóvil procedente desde el aeropuerto de El Dorado, donde las autoridades del país le dieron la bienvenida.
En el exterior de la nunciatura apostólica en Bogotá, delante del portón, un grupo de niños con trajes folklóricos hizo una coreografía, otro grupo de jóvenes cantó al son de música y una banda de música centroamericana tocó en su honor.
Además el interior del edificio, el Pontífice tenía en programa recibir a dos instituciones que atienden a niños en dificultad. En medio de todo esto el Papa fue a rezar en la capilla de sede diplomática del Vaticano. Allí cenó y la comida fue preparada por la cocinera habitual de la institución. El Pontífice pernoctará en este edificio las cuatro noches que pasará en Colombia.
Hasta el domingo el papa visitará cuatro ciudades: Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena. En total celebrará tres misas y pronunciará 12 discursos.

 

 

06/09/2017-06:17
Rosa Die Alcolea

El Santo Padre antes de viajar saluda a dos familias que perdieron todo

(ZENIT – Miércoles, 6 de Sept. 2017).- Esta mañana, el papa Francisco, antes de salir de Casa Santa Marta para viajar a Colombia, ha saludado a dos familias, compuestas de 5 personas, cuyas casas se han incendiado durante los últimos incendios del verano en el área de Ponte Mammolo en Roma.
Así lo ha comunicado esta mañana, miércoles 6 de septiembre de 2017, la Oficina de Prensa de la Santa Sede y ha indicado que Limosnería apostólica de Vaticano está ayudando a estas familias en nombre del Santo Padre.

 

 

06/09/2017-06:16
Redacción

Fallece el cardenal Carlo Caffarra, Arzobispo emérito de Bolonia

(ZENIT – 6 Sept. 2017).- Ha fallecido el cardenal Carlo Caffarra, titular de la iglesia romana de San Juan Bautista de los Florentinos, arzobispo emérito de Bolonia (Italia), a los 79 años y tras un período de enfermedad.
La Santa Sede lo ha comunicado en una nota oficial hoy, 6 de septiembre de 2017, junto a la biografía del sacerdote.
Mons. Caffarra dirigió la Archidiócesis de la capital de la región Emilia-Romaña desde 2004 hasta finales de octubre de 2015 cuando presentó su renuncia por límite de edad. El Papa se reunió con él y con otros cardenales en april de 2017, en Carpi.
Fue uno de los cardenales que celebraba la misa tridentina después de la reforma litúrgica y fue miembro del Supremo Tribunal de la Signatura Apostólica, de la Congregación de la Causa de los Santos, del Pontificio Consejo para la Familia y de la Academia Pontificia por la Vida.
El cardenal nació el 1 de junio de 1938 en Samboseto de Busseto, en la provincia de Parma y fue ordenado el 2 de julio de 1961, recibió el Doctorado en Derecho Canónico en la Pontificia Universidad Gregoriana y el Diploma de Especialización en Teología Moral en la Pontificia Academia de Alfonsiana.
A su regreso a la diócesis, fue párroco en la Catedral de Fidenza, donde impartió la asignatura de Teología Moral en los Seminarios de Parma y Fidenza. Más tarde, se convirtió en profesor de teología fundamental en la Facultad de Teología del Norte de Italia en Milán y en el departamento de Ciencias Religiosas de la Universidad Católica del Sagrado Corazón de Milán. Allí se encontró con Mons. Luigi Giussani, fundador de Comunión y Liberación, y mantuvo también una profunda amistad con Don Divo Barsotti, místico y teólogo.

 

“Humanae Vitae”

En los años setenta comenzó a profundizar en los temas del matrimonio, la familia y la procreación humana, impulsado por la proposición de numerosas parejas de cónyuges y novios para recibir una visión cristiana del matrimonio. Estos fueron los años del gran debate suscitado por la publicación de la Encíclica “Humanae vitae”.
Enseñó, entonces, Ética médica en la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Católica del Sagrado Corazón en Roma, y en agosto de 1974 fue nombrado por el Papa Pablo VI miembro de la Comisión Teológica Internacional, derecho retenido para los dos lustros siguientes. Continuó la profundización teológica, antropológica y ética del tema de la procreación humana, que se volvió pungente después que naciera la primera persona concebida in vitro el 25 de julio de 1978.
Como representante de la Santa Sede, asistió al Primer Congreso Mundial sobre Infertilidad Humana y Procreación Artificial, celebrada en la Fundación Cini de Venecia, en septiembre de 1978.

 

Pontificio Instituto”Juan Pablo II”

En 1980, Juan Pablo II lo nombró experto en el Sínodo de los Obispos sobre el Matrimonio y la Familia y en enero de 1981 le confirió el mandato de fundar y presidir el Pontificio Instituto “Juan Pablo II” para el estudio del matrimonio y la familia, donde se encargó del curso de Ética de la procreación y Seminarios de Ética general y de Bioética.
En 1983, por un período de cinco años, fue consultor de la Congregación para la
Doctrina de la Fe; ha sido también miembro de la Comisión de estudio para la ingeniería genética instituida “ad actum” en el Ministerio de Sanidad de Italia.
Al mismo tiempo, impartió cursos o lecciones en varias universidades extranjeras: la Universidad Mistral y la Universidad Católica de Santiago de Chile; la Universidad de Sydney; la Universidad de Navarra (Pamplona) y la Complutense de Madrid. En 1988 fundó en Washington D.C., la primera Sección extra-urbana del Instituto Pontificio “Juan Pablo II” para Estudios sobre el Matrimonio y la Familia, y más tarde, la sección mejicana y la española. También recibió el doctorado en Cartas Cristianas de la Universidad Franciscana en Steubenville (Ohio).

 

Arzobispo de Ferrara-Comacchio

El 8 de septiembre de 1995 fue nombrado Arzobispo de Ferrara-Comacchio. Recibió la ordenación episcopal en la Catedral de Fidenza el 21 de octubre de ese mismo año de manos del cardenal Giacomo Biffi, y el 4 de noviembre comenzó la actividad pastoral.
Fue presidente de la Conferencia Episcopal de Emilia-Romaña y moderador del Tribunal Flaminio para las causas matrimoniales.
El 16 de diciembre de 2003, Juan Pablo II lo nombró Arzobispo Metropolitano de Bolonia. Se estableció en la Archidiócesis el 15 de febrero de 2004. Dirigó la Archidiócesis de Bolonia hasta el 27 de octubre de 2015.
Participó en el cónclave celebrado en marzo de 2013 que eligió al papa Francisco.
Creado cardenal por Benedicto XVI en el consistorio ordinario público celebrado el 24 de marzo de 2006 y asignado con el título de San Juan el Bautista de los Florentinos.

 

 

06/09/2017-05:00
Antonio Rivero

P. Antonio Rivero, L.C. “Si tu hermano peca, no dejes de amarle: ayúdale”

COMENTARIO A LA LITURGIA DOMINICAL

Domingo XXIII
Ciclo A

Textos: Jr 33, 7-9; Rm 13, 8-10; Mt 18, 15-20

Antonio Rivero, L.C. Doctor en Teología Espiritual, profesor en el Noviciado de la Legión de Cristo en Monterrey (México) y asistente del apostolado Logos.

Idea principal: La corrección fraterna, no como fiscal o espía, sino como hermano que ama, pues sólo quien ama tiene derecho a corregir.

Resumen del mensaje: Hoy Dios nos invita a la corrección fraterna. Somos vigías y centinelas (primera lectura) que debemos avisar si se acerca algún peligro para nuestra salvación y la salvación de nuestros hermanos, pues Dios nos pedirá cuenta de nuestro hermano. Cristo en el discurso comunitario presentado por Mateo nos da las pautas para esta corrección: primero en particular y en privado; después con ayuda de otro hermano como testigo para que el corregido se dé cuenta que la cosa es seria e importante; y si tampoco el corregido hace caso, hay que decirlo a la comunidad eclesial para decirle que ese hermano no quiere pertenecer a la comunidad. Esta corrección fraterna tiene que estar motivada por el amor (segunda lectura), síntesis de toda la ley, y con humildad.

 

Puntos de la idea principal:

En primer lugar, la corrección fraterna parece una de las constantes de la pedagogía de Dios ya en el Antiguo Testamento. ¡Cuántas veces tuvo Moisés que corregir, en nombre de Dios, a ese pueblo de dura cerviz, y los mismos profetas! Dios “golpea” para que aprendamos (cf. Jr 2, 30; 5, 3; Ez 6, 9), o para purificarnos (cf. Is 1, 24), o para expiar nuestras culpas (cf. Mi 7, 9). ¡Feliz el hombre a quien corrige Dios! (cf. Job 5, 17). Dios al que ama, reprende (cf. Deut 8, 5; Prov 3, 11). El mismo Dios pide corregir al prójimo (cf. Lev 19, 17).

En segundo lugar, la corrección fraterna la ejercitó Jesús con sus apóstoles, con los jefes religiosos y políticos de su tiempo, y con la turba. Jesús corrige a sus discípulos sus miras raquíticas, horizontalistas, humanas, ambiciosas. Jesús corrige la hipocresía de los jefes religiosos, y por querer manipular a Dios. Jesús corrige los desmanes, injusticias y abusos y corrupción de los jefes políticos y les dice que la autoridad es servicio y no dominio. Jesús corrige de la turba su inconstancia, sus caprichos, sus intereses egoístas; muchos le siguen para arrancar curaciones y pan, sin las debidas disposiciones de fe y confianza en Él. Jesús corrige porque ama y porque quiere la salvación de todos.

Finalmente, también nosotros deberíamos poner en práctica esta corrección fraterna. Amar al prójimo no es siempre sinónimo de callar o dejarle que siga por malos caminos, si en conciencia estamos convencidos de que es este el caso. Amar al hermano no sólo es acogerle o ayudarle en su necesidad o tolerar sus faltas; también, a veces, es
saberle decir una palabra de amonestación y corrección para que no empeore en alguno de sus caminos. Al que corre peligro de extraviarse, o ya se ha extraviado, no se le puede dejar solo. Si tu hermano peca, no dejes de amarle: ayúdale. Corrección fraterna, primero en nuestra familia, corrigiendo al esposo o esposa, a los hijos, puntos objetivos que tienen que superar. Después, entre nuestros amigos, si nos consta que caminan por malos caminos. Más tarde, en nuestros trabajos, si vemos que hay corrupción, malversación de fondos o engaños. El obispo o el párroco deben ejercer su guía
pastoral en la diócesis o parroquia, respectivamente. Y lógicamente también en nuestros grupos y comunidades eclesiales y parroquiales, para que no nos corroan la envidia, la murmuración y las ambiciones. “Cuando alguno incurra en alguna falta, vosotros, los espirituales, corregidle con espíritu de mansedumbre, y cuídate de ti mismo, pues también tú puede ser tentado” (Gal 6, 1).

Para reflexionar: abramos hoy las siete cartas del ángel a las siete iglesias del Apocalipsis, en las que con las alabanzas y ánimos, se mezclan también palabras muy expresivas de corrección y acusación de parte de Dios. En la regla de san Benito se dice: “El abad se preocupará con toda solicitud de los hermanos culpables, porque no necesitan médico los sanos, sino los enfermos. Por tanto, como un médico perspicaz, recurrirá a todos los medios; como quien aplica cataplasmas, esto es, enviándole monjes ancianos y prudentes, quienes como a escondidas consuelen al hermano vacilante y le muevan a una humilde satisfacción, animándole para que la excesiva tristeza no le haga naufragar, sino que, como dice también el apóstol, la caridad se intensifique y oren todos por él” (n. 27).

Para rezar: Señor, corrígeme con cariño y ternura. Señor, que sepa corregir a mis hermanos con recta intención y por amor. Señor, doy permiso a mis hermanos para que me corrijan lo que en mí vean torcido y no acorde a tu evangelio. Amén.

 

 

06/09/2017-05:44
Felipe Arizmendi Esquivel

“Ya no hay pobres”, por Mons. Felipe Arizmendi

YA NO HAY POBRES

+ Felipe Arizmendi Esquivel
Obispo de San Cristóbal de Las Casas

VER
Estando de vacaciones en mi pueblo natal, Chiltepec, un sobrino me dijo que, después de las fiestas patronales a la Virgen de Belén, habían sobrado más de doscientos mil pesos, y que habían pensado, junto con el párroco, destinarlos a renovar el decorado del templo, cosa que, en mi concepto, no hace tanta falta. Le dije que a la Virgen le gustaría mucho que, en vez de eso, se le hiciera una casita a una persona pobre del pueblo, o se ayudara de alguna forma a los pobres.
Para mi sorpresa, me dijo que en el pueblo ya no había pobres... Me hizo ver que un buen número de familias recibe remesas de quienes emigraron a los Estados Unidos, y regularmente envían dinero a los suyos. Los hermanos de un sacerdote del lugar han implementado una importante empresa de flores, también para exportación, y dan trabajo a cientos de personas, tanto que escasea la mano de obra. Otros se han dedicado a cultivar jitomates bajo invernaderos, chiles manzanos para exportación, aguacates, etc. Ciertamente ha mejorado mucho la vida de la comunidad. Sin embargo, buscando y buscando, dimos con una persona muy pobre; la visitamos y le ofrecimos construirle una casita sencilla. No quiso; sólo nos aceptó que le construyéramos un baño, cosa que hicimos no con el dinero del templo, sino con aportaciones voluntarias nuestras.
¿Ya no hay pobres? ¡Claro que los hay, y demasiados! Sólo hace falta corazón y cercanía para descubrirlos y ver qué podemos hacer por ellos y con ellos.
En el reciente informe del gobierno federal, se afirma que, en el país, han disminuido más de dos millones las personas en pobreza extrema. Pero se reconoce que más de cincuenta millones de mexicanos viven aún en pobreza.
Hay que analizar los índices que se toman en cuenta para calificar la pobreza. Porque, por ejemplo, Chiapas ocupa uno de los lugares altos de pobreza, sobre todo en poblaciones indígenas. Pero en mis casi 27 años que llevo aquí, he visto cambios muy notables: hay más carreteras, más electrificación, más escuelas, incluso de nivel medio y superior, más clínicas, aunque no suficientemente dotadas, más agua entubada en las casas, piso firme en casi todos los hogares, televisión, radio y electrodomésticos en muchísimos domicilios, mejores construcciones domésticas, con sus servicios. Miles de chiapanecos, incluso los calificados en pobreza extrema, cuentan con teléfonos celulares, y sostenerlos cuesta dinero, que buscan y tienen. Es decir, que ha mejorado el nivel general de vida, es claro y notorio; pero afirmar que ya no hay pobres, sería una aberración y un desconocimiento total de la realidad. Los hay y sumamente pobres. Son una constante llamada de atención a nuestro corazón.

PENSAR
El Papa Francisco, al establecer la Jornada Mundial de los Pobres, que este año será el 19 de noviembre, nos dice: “No pensemos sólo en los pobres como los destinatarios de una buena obra de voluntariado para hacer una vez a la semana, y menos aún de gestos improvisados de buena voluntad para tranquilizar la conciencia. Estas experiencias, aunque son válidas y útiles para sensibilizarnos acerca de las necesidades de muchos hermanos y de las injusticias que a menudo las provocan, deberían introducirnos a un verdadero encuentro con los pobres y dar lugar a un compartir que se convierta en un estilo de vida. En efecto, la oración, el camino del discipulado y la conversión encuentran en la caridad, que se transforma en compartir, la prueba de su autenticidad evangélica. Y esta forma de vida produce alegría y serenidad espiritual, porque se toca con la mano la carne de Cristo. Si realmente queremos encontrar a Cristo, es necesario que toquemos su cuerpo en el cuerpo llagado de los pobres, como confirmación de la comunión sacramental recibida en la Eucaristía. El Cuerpo de Cristo, partido en la sagrada liturgia, se deja encontrar por la caridad compartida en los rostros y en las personas de los hermanos y hermanas más débiles. Son siempre actuales las palabras del santo Obispo Crisóstomo: «Si queréis honrar el cuerpo de Cristo, no lo despreciéis cuando está desnudo; no honréis al Cristo eucarístico con ornamentos de seda, mientras que fuera del templo descuidáis a ese otro Cristo que sufre por frío y desnudez». Estamos llamados, por lo tanto, a tender la mano a los pobres, a encontrarlos, a mirarlos a los ojos, a abrazarlos, para hacerles sentir el calor del amor que rompe el círculo de soledad. Su mano extendida hacia nosotros es también una llamada a salir de nuestras certezas y comodidades, y a reconocer el valor que tiene la pobreza en sí misma”.

ACTUAR
Hay muchos pobres entre nosotros, y a veces ni cuenta nos damos. Olvidados y menospreciados, incluso en el propio hogar. Abramos el corazón hacia ellos y pidamos
al Espíritu Santo que nos convierta, para que seamos misericordiosos, al estilo de Jesús.

 

 

06/09/2017-04:35
Isabel Orellana Vilches

Beata Eugenia Picco – 7 de septiembre

(ZENIT – Madrid).- Es cierto que el influjo positivo de la familia hacia la fe ha suscitado numerosas vocaciones a lo largo de los siglos. Pero no es una condición sine qua non para ello. Eugenia, que nació en Crescenzago, Milán, Italia, el 8 de noviembre de 1867, era hija de un matrimonio desestructurado. Su padre José Picco, ciego, fue un destacado músico de la prestigiosa Scala de Milán. Y su madre, Adelaida del Corno, se dejó llevar por la debilidad, que no fue precisamente su esposo, y se entregó en brazos de la fama y oropeles rindiendo culto a la vanidad y al fulgor del dinero. Incansable viajera, buscando tal vez una felicidad que se le resistía y que no encontraría nunca en la forma de vida disipada que solía llevar, no dudaba en dejar a la pequeña con sus abuelos. Primeramente, salía para acompañar a su marido, pero cuando un día regresó a casa sin él (desaparecido misteriosamente en el transcurso de un viaje a Rusia), continuó con sus desmanes. Y Eugenia se vio obligada a soportar al nuevo compañero de su madre, con el que ésta tuvo tres hijos más, y a escuchar todo lo estoicamente que le fue posible los reproches maternos porque soñaba para ella un futuro como artista, además de sufrir los inconvenientes creados por su amante.
Sin duda ninguna, éste no era el ambiente propicio para que se forjara una vocación. «Peligros y ocasiones tanto en casa como afuera», diría Eugenia después. Y es que su pasión adolescente, incontenible a sus 14 años, se volcó en un muchacho joven. Era hermosa y elegante; su atractivo se completaba con sus dotes para la música. Desenvuelta y libre iba y venía inmersa en la farándula. Por fortuna, una profesora, Giuseppina Allegri, experta en los conflictos que surgen a estas edades, se ocupó de ella. Debió apreciar los nobles sentimientos que poseía y orientó sus pasos hacia quienes podían ayudarla espiritualmente. Allegri le presentó a la religiosa María Virginia Pizzetti. La beata se convenció de la certeza de las palabras de Pizzetti: era Jesús el que obraba en su interior; nadie más. La presencia divina que latía en su corazón, aún sin estar familiarizada con ella todavía, le alentaba a orar creyendo y esperando recibir una respuesta tanto en la capilla de las hermanas ursulinas del Sagrado Corazón como en la basílica milanesa de San Ambrosio. Una noche de particular sufrimiento, en la primavera de 1886, a través de una imagen que pendía sobre la pared bajo la cual tenía su cama, en medio de su oración se sintió llamada a vivir la santidad.
Tenía casi 20 años y la invitación de Dios era para ella un torrente de bendiciones. Pensaba que su verdadero hogar sería la Congregación de las Pequeñas Hijas de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, sita en Parma. Una Orden a la que se encaminó por sugerencia de las ursulinas que consideraron más oportuno que se integrase en esa fundación, valorando el hecho de que ello le permitiría escapar del ambiente asfixiante que le rodeaba en Milán. Para llevar a cabo su empeño, en agosto de 1887 tuvo que huir de su domicilio. Agustín Chieppi, artífice de esa Obra creada en 1865 junto a Anna Micheli, la acogió paternalmente. Se hizo cargo de su sufrimiento y de las circunstancias en las que había tenido que vivir. Y en agosto del año siguiente comenzó el noviciado. Profesó en presencia del fundador en 1891 y emitió votos perpetuos en 1894. El resto de su vida lo destinó a cumplir la voluntad de Dios con espíritu generoso, fiel, humilde... Ella misma sintetizaba su anhelo, diciendo: «Como Jesús ha escogido el pan, algo tan común, así debe ser mi vida, común... accesible a todos y, al mismo tiempo, humilde y escondida, como lo es el pan».
Impartió música, canto y francés a las alumnas del colegio de la Congregación. Después le encomendaron sucesivas misiones. Fue maestra de novicias, archivista, secretaria general y consejera. En 1911 fue elegida superiora general, oficio que desempeñó hasta el fin de sus días. Logró que su gobierno fructificase por su caridad, prudencia y fidelidad al carisma de su fundador. Su sostén fue la oración y la Eucaristía. En el decurso de la Primera Guerra Mundial se volcó en curar a los heridos acogidos por la comunidad en la casa madre. Pero allí acudían también los que estaban ingresados en hospitales. Ellas enseñaban a los hijos de los reclutados en el frente ya que estos muchachos no podían recibir formación. Los que nada poseían, los niños, los que nadie estimaba hallaron en Eugenia una madre. Era extraordinariamente sensible al dolor del prójimo. Seguro que en esos días aciagos, de tanto sufrimiento, recordó vivamente las palabras que les dirigía su fundador: «Tenéis que estar listas para ir hasta los campos de batalla». «Las Pequeñas Hijas tienen que estar listas a donar la última gota de su sangre para los hermanos».
Todo en Eugenia fue una suma de mortificación, obediencia e inocencia evangélicas. Supo sobrenaturalizar lo ordinario con religiosa maestría. Muchos le confiaban sus cuitas, buscaban su consejo y salían fortalecidos. Fue una gran formadora. No tuvo buena salud, y aún se debilitó más con las privaciones y sacrificios. En 1919, año en el que fue reelegida superiora general, a causa de la tuberculosis ósea se le amputó el pie derecho, un episodio dramático que acogió serenamente. Mons. Conforti, prelado de Parma, le aconsejó paternalmente: «No se gobierna con los pies, sino con la cabeza». Ciertamente. Lo que antes era ir y venir quedó «reducido», si así puede decirse, a la ofrenda en estricta oración. Nada más fecundo que ello. Las secuelas no le abandonaron y murió el 7 de septiembre de 1921. Fue beatificada el 7 de octubre de 2001 por Juan Pablo II. En su homilía recordó que «ante el sufrimiento, con los inevitables momentos de dificultad y desasosiego que entraña [...], supo transformar la experiencia del dolor en ocasión de purificación y crecimiento interior».