29.11.11

¿Es la organización de los Testigos de Jehová una secta? (6)

A las 9:54 PM, por José Miguel Arráiz
Categorías : Sectas, Testigos de Jehová
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Parte VI – Doctrina

En la entrega anterior estudiabamos como la organización de los testigos de Jehová reformaba la forma de pensar de los adeptos, de manera de no solo extirpar su capacidad crítica respecto a la propia organización, sino de lograr controlar el flujo de información que reciben por medio del casi exclusivo estudios de sus publicaciones.

De esta manera los adeptos creen estar basando su vida en las enseñanzas de la Biblia y no se percatan que en la realidad ocurre todo lo contrario. Ya habiendo tratado en otras ocasiones algunas de sus principales objeciones respecto a las doctrinas católicas: La Trinidad (desde el punto de vista bíblico[1] y patrístico[2]), la inmortalidad del alma[3], el infierno[4], etc., en esta ocasión nos detendremos solamente en aquellas doctrinas que considero permiten ejercer un control sectario sobre los adeptos.

 

Los 144.000

Una de las doctrinas más curiosas que profesan los testigos de Jehová, es que solamente 144.000 personas irán al cielo, solo ese número podrá ser hijo de Dios, el resto, la inmensa mayoría, “la gran muchedumbre” de los salvados, solo tendrá una esperanza terranal: vivir en una tierra paradisíaca muy “feliz”….pero sin nunca ver a Dios.

Esta doctrina es una pieza clave para el control de los adeptos, porque divide a los creyentes en dos clases: una minoría a quienes llaman “los ungidos”, “los gloriosos” de la cual a su vez está compuesto el “cuerpo gobernante”, y las ovejas (la gran muchedumbre) que están bajo el gobierno de los anteriores.

De esta manera, a las ovejas se les prohibe intepretar la Biblia, mientras el selecto grupo del cuerpo gobernante se sirve de ese derecho[5]. Los adeptos tienen que aceptar sus interpretaciones so pena de apostasía, y lo hacen generalmente de buena gana porque ellos creen que los ungidos están reinando con Cristo. No profundizaré más en este tema, pues ya ha sido tratado en el artículo “Los testigos de Jehová no son Hijos de Dios[6], pero si recalcar varios puntos que deberían ser reflexionados por los testigos de Jehová que lean esta entrega.

· Surge la pregunta obligatoria: ¿Cómo saben quien va al cielo o a la tierra? ¿Por qué dicen por ejemplo que Juan el bautista[7], Moisés y el profeta Daniel[8] les toca ir a la tierra, pero al buen ladrón o a los “ungidos” del cuerpo gobernante les toca reinar en el cielo?. ¿Qué tienen esos señores de traje y corbata en Brooklyn que no tenga Juan el bautista, de quien dijo Jesús “no ha surgido entre los nacidos de mujer uno mayor que él[9]? ¿Qué tienen ellos que no tenga Moisés y Daniel?[10]

· Juan 1,12 dice refiriéndose a La Palabra (Jesús) “a todos los que la recibieron les dio poder de hacerse hijos de Dios, a los que creen en su nombre”. Eso incluye a todos los creyentes, no solo a 144.000.

· Apocalipsis 7,9 refiriéndose a la gran muchedumbre dice: “Después miré y había una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y el Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos”. Más adelante en el versículo 11 dice que estaban también frente al trono todos los ángeles, y en el versículo 15 dice nuevamente de la gran muchedumbre “están delante del trono de Dios, dándole culto día y noche en su Santuario; y el que está sentado en el trono extenderá su tienda sobre ellos”. No dice que estén en la tierra.

A los testigos de Jehová también les enseñan que Dios completó el número de los 144.000 en 1935:
 

Durante los años treinta parece que se completó el número de “los llamados y escogidos y fieles”, los 144.000… No sabemos a cuántos ungidos se recogió en el siglo primero ni a cuántos de entre la “mala hierba” durante los oscuros siglos de la gran apostasía de la cristiandad”[11]


· ¿Cómo saben que para ese año el número estaba completo si no saben cuantos ungidos se recogió en las épocas anteriores?
· ¿Cómo se explica según los propios anuarios de la organización que el número en vez de descender aumente?[12].
 

Mientras a los testigos de Jehová les enseñan esto, por otro lado también les dicen: “La Biblia es nuestra única norma y sus enseñanzas nuestro único credo[13].
 

1914

En nuestra entrega sobre los testigos de Jehová y el año 1914[14], estudiamos como a raíz de una serie de profecías fallidas, en la cual esperaban la venida de Cristo reiteradamente para 1914, 1918, 1925, 1941 y 1975, la doctrina toma su carácter definitivo: Cristo si vino pero de manera “invisible” en 1914 y es en ese año y no antes en que asume su poder como Rey[15], y que es coronado como Rey celestial[16].
 

“Nosotros estamos totalmente convencidos de que Jesús fue entronizado en 1914[17]

Todo indica que Jesucristo comenzó a reinar en el cielo en 1914[18]

“A estas alturas de la historia contamos con irrefutables pruebas que corroboran que Cristo comenzó su Reinado mesiánico en los cielos en 1914[19]


A pesar de que Jesús ya había dicho a sus apostoles “Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra[20], ellos aceptan sin resistencia se le dio ese poder casi dos milenios después. Ni hablar del fundamento de interpretaciones como la venida “invisible” que están completamente descartadas por el evangelio:

“Mirad, viene acompañado de nubes: todo ojo le verá, hasta los que le traspasaron, y por él harán duelo todas las razas de la tierra”[21]

“Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del hombre; y entonces se golpearán el pecho todas las razas de la tierra y verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo con gran poder y gloria. El enviará a sus ángeles con sonora trompeta, y reunirán de los cuatro vientos a sus elegidos, desde un extremo de los cielos hasta el otro”[22]

Como parte de esta doctrina, los testigos de Jehová afirman que no morirá la generación que vio los sucesos ocurridos en 1914:
 

“Aún viven muchos millones de personas de aquella generación. Algunas de ellas ‘no pasarán de ningún modo hasta que sucedan todas las cosas’. (Lucas 21:32.)

Desde el punto de vista puramente humano, podría parecer que dichos sucesos difícilmente podrían ocurrir antes que la generación de 1914 desaparezca de la escena. Pero el cumplimiento de todos los sucesos predichos que habían de afectar a la generación de 1914 no depende de medidas humanas, que son relativamente lentas. La palabra profética que Jehová pronunció mediante Cristo Jesús es: “Esta generación [de 1914] no pasará de ningún modo hasta que sucedan todas las cosas” (Lucas 21:32). Además, Jehová, quien es la fuente de la profecía inspirada e infalible, hará que se cumplan las palabras de su Hijo en un período relativamente corto. (Isaías 46:9, 10; 55:10, 11.)

La proximidad del Reino de Dios hoy significa el fin de los divisivos sistemas políticos, religiosos y comerciales de la actualidad. Significa que se introducirá un nuevo gobierno justo para todas las personas obedientes de la humanidad. Usted puede escoger la vida eterna bajo este arreglo de “nuevos cielos y una nueva tierra” (2 Pedro 3:13; Juan 17:3). Sí, usted puede llegar a ver este prometido Nuevo Orden, junto con los sobrevivientes de la generación de 1914… la generación que no pasará
[23]


A pesar de estar ya a casi 100 años de 1914 la organización se resiste a rectificar esta doctrina, y he aquí otro elemento de control sobre los adeptos: durante años han enseñado no solo que Cristo fue designado Rey en 1914, sino que en 1918 inspeccionó a todas las denominaciones cristianas, y en 1919 les nombró a ellos como el único canal de Dios sobre la tierra. De esta manera, cualquiera que abandone la congregación, se estará privando de toda posibilidad de salvación. Modificar esta doctrina tendría importantes repercusiones, ya que si Jesús no vino en 1914, tampoco les visitó en 1919.
 

“¡“El esclavo fiel” supera la prueba!…Poco después, en 1919, ocurrió algo inesperado. Leemos: “Justamente a mitad de la noche se levantó un clamor: ‘¡Aquí está el novio! Salgan a su encuentro’. Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y pusieron en orden sus lámparas” (Mateo 25:6, 7). Justo cuando todo parecía más oscuro, se produjo una llamada a la acción. Ya en 1918, Jesús, “el mensajero del pacto”, había venido al templo espiritual de Jehová para inspeccionar y purificar a la congregación de Dios (Malaquías 3:1). Ahora, los cristianos ungidos tenían que salir a encontrarse con él en los patios terrestres de dicho templo. Era hora de que ‘despidieran luz’ (Isaías 60:1; Filipenses 2:14, 15).”[24]


Note como sacan de contexto la parábola de las diez vírgenes, cuya enseñanza es mantener preparados a los creyentes, para aplicarla a exclusivamente a los testigos de Jehová que esperaban la venida de Cristo en 1914. Según esta intepretación, aquellos que dejaron la congregación tras el chasco son las “virgenes necias”. Interpretaciones que solo puede tomar en serio alguien que ya ha decidido creer lo que diga la organización no importa que sea.

Así, mediante la combinación de estas doctrinas, consiguen mantener el control sobre los adeptos, mientras se aseguran los beneficios de ser considerados la clase ungida y gobernante, designada en persona por el propio Cristo en 1919.

NOTAS

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[1] http://www.apologeticacatolica.org/Trinidad/TrinidadN01.htm
[2] http://www.apologeticacatolica.org/Trinidad/TrinidadN02.html
[3] http://www.apologeticacatolica.org/Masalla/Masalla29.html
[4] http://www.apologeticacatolica.org/Masalla/Masalla30.html
[5] En esencia la misma actitud que tomaron los reformadores protestantes: usurparon el derecho de interpretar la Biblia auténticamente del Magisterio de la Iglesia, pero para evitar los cismas entre ellos mismos lo negaron a sus adeptos.
[6] http://www.apologeticacatolica.org/Protestantismo/Sectas/SectasN05.html
[7] La Atalaya, 1 de Enero de 1997, pág. 6-11
[8] La Atalaya, 15 de Febrero de 1998, pág. 17-22
[9] Mateo 11,11
[10] Para negar que Juan el bautista irá al cielo citan Mateo 11,11-12 y le aplican una exégesis francamente ridícula (ver La Atalaya del 1 de Enero de 1987). Una objeción similar había refutado San Agustín en contra adversarium legis et prophetarum, 2,5
[11] La Atalaya, 1 de Febrero de 1999, pág. 14-19
[12] Por ejemplo, en 1996 quedaban 8.757 ungidos, pero en el año siguiente habían 8.795. Lo mismo entre 1994 y 1995 habían 28 ungidos más.
[13] Palabras de Russell en 1882 citadas por el libro Proclamadores (año 1993). Lo mismo en La Atalaya, 15 de Octubre de 1998.
[14] http://www.apologeticacatolica.org/Protestantismo/Sectas/SectasN02.html
[15] La Atalaya, 1 de Septiembre del 2007, pág. 31
[16] Ibid. pág. 17-20
[17] La Atalaya, 1 de Enero del 2007, pág. 17-19
[18] La Atalaya, 15 de Septiembre del 2006, pág. 2-3
[19] La Atalaya, 1 de Mayo de 2006, pág. 27-31
[20] Mateo 28,18
[21] Apocalipsis 1,7
[22] Mateo 24,30
[23] La Atalaya, 15 de Mayo de 1984, pág. 4-7
[24] La Atalaya, 1 de Marzo del 2004, pág. 13-18