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CRONOLOGÍA DE UN ABANDONO, PARQUE NATURAL DE LIENCRES

 

"El mundo es un lugar peligroso, no a causa de los que hacen el mal, sino por aquellos que no hacen nada para evitarlo"
ALBERT EINSTEIN

 

 

 

Francisco Javier Toraya | 01/09/2020


 

 

 

 

 

El diario ALERTA publicó este día una tribuna de opinión con mi parecer con relación al abandono que presenta el Parque Natural de Liencres. Considero que soy una voz autorizada para opinar con relación a lo que acontece en el Parque y más viendo el abandono y dejadez que muestra todos los días ese entorno natural.

Adjunto traslado íntegramente el texto publicado esperando sea de vuestro agrado y compartáis mi opinión.

 

 

 

DIARIO ALERTA, 30-agosto-2020

 

EL PARQUE NATURAL DE LIENCRES:

CRONOLOGÍA DE UN ABANDONO

 

 

 

 

 

 

El Parque Natural de Liencres es un entorno natural de una pluralidad y riqueza medioambiental que le hace inigualable, sobre todo por la variedad de ecosistemas diferentes que interactúan y cohabitan, lo cual hace que la protección y el mantenimiento tengan que ser una obligación constante si queremos que no se vuelva frágil y por lo tanto vulnerable. Cabe recordar que el Parque es la consecuencia de la actuación de los vecinos de Liencres, que en la década de los cincuenta actuaron como ecólogos aficionados y llevaron a cabo la plantación de todos los árboles, aunque inicialmente la finalidad fuera fijar las dunas móviles que invadían las tierras de labranza, gracias a un consorcio entre la Diputación Provincial de Santander, Patrimonio Forestal del Estado y la Junta Vecinal de Liencres.

La Comunidad Autónoma de Cantabria toma conciencia de la importancia del entorno y continua dando marco legal al Parque Natural mediante el Decreto 101/1986 a través del cual adquiere la Declaración de Parque Natural de la Dunas de Liencres, que a su vez sirve de soporte reglamentario para el desarrollo del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) un año después. En este periodo se adquiere sensibilización con el entorno y se establece su protección, a la vez que se comienzan los trabajos de actualización de infraestructuras, limpieza y podas en el interior. A mi juicio, la época donde más se notaron las actuaciones, ya que de ahí derivan la mejora del acceso, los aparcamientos, vallado perimetral y dotación de servicios a la zona, incluso se crean las sendas interiores y se inician los trabajos de poda selectiva y limpieza. De esta época son la red de caminos y accesos a las distintas bocas de riego para las motobombas.

El Parque Natural se incorpora a la Red de Espacios Naturales Protegidos de Cantabria mediante el Decreto 26/2007, de 8 de marzo, estableciendo la figura de Patronado para su gestión. Se trata de un órgano colegiado con mayor número de miembros y que pretendía ser la solución definitiva que diera cobertura y remedio a todos los problemas que tenía el Parque y que irían surgiendo. El tiempo ha demostrado que la realidad ha sido bien distinta, ya que en estos últimos años se ha podido constatar el deterioro paulatino que ha sufrido esta zona de especial conservación. Todos los usuarios hemos podido constatar la falta de mantenimiento en el mismo: Es evidente el estado de conservación de los aparcamientos, la invasión de plantas y matorral en el interior que recupera terrenos que ya estaban limpiados y por lo tanto de esta manera se incrementa de una forma considerable el riesgo de incendio. Por otra parte, las sendas que estaban originariamente trazadas, ahora están totalmente desdibujadas y posibilitan que todo el mundo vaya por donde le apetezca. El vial de servicio que discurre por la parte Norte del Parque y que trataba ser una vía de evacuación está prácticamente cerrado, dificultando una hipotética salida en caso de que se produzca algún riesgo.

Mientras, el Patronato del Parque Natural Dunas de Liencres lleva casi dos años sin reunirse, lo cual no parece muy comprensible a tenor de la situación tan caótica que presenta el entorno y sobre todo que cada día es urgente frenar el notable deterioro que presenta el mismo y que con el tiempo es más palmario. Ante esta circunstancia, el Grupo Popular solicitó vía moción ante el Ayuntamiento de Piélagos que fuera el impulsor y propulsor de la reunión inmediata del Patronato, si bien, sorpresivamente, esta moción decayó demostrando el poco interés que tiene el Parque Natural para el Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Piélagos. Tampoco parece que la Consejería de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del Gobierno de Cantabria esté muy sensibilizada con ponerse a trabajar en el entorno de inmediato, ni tan siquiera ahora que está pendiente de que sea nombrado el primer GEOParque cántabro por la UNESCO. Subyace por todo esto, que el principal problema que presenta el Parque Natural es competencial y de liderazgo, ocasionado por los Entes y Administraciones con responsabilidad para tomar decisiones que se muestran impasibles con lo que ocurre en el entorno.

Advierto que es urgente y necesario tener claro el patrón de Parque Natural que queremos y que sea sostenible para cualquier usuario del entorno. Para el Partido Popular de Piélagos es indudable y factible el modelo de Parque que queremos, considerando básicos aspectos como disponer de un aparcamiento disuasorio en la zona Sur del mismo con mayor capacidad y que pueda albergar auto-caravanas, establecer sentido único de circulación para minimizar riesgos, sobre todo para darle fluidez al movimiento de vehículos de emergencias o cualquier otro vehículo y también los viandantes. Igualmente creemos que se debería mejorar y ampliar la zona de servicios para dar cobertura a otros usos como pudiera ser un Centro de Interpretación del Parque.

Sirva como conclusión que el Parque Natural de Liencres lleva mucho tiempo sin un rumbo claro, sin definir exactamente los usos que queramos dar al mismo y que a su vez nos permita disfrutar de un maravilloso entorno sin tener que pensar donde puedo aparcar porque los pocos aparcamientos existentes están copados por autocaravanas, si voy a romper mi coche en un bache, o si voy a ver algo que no deseo. Es necesaria una apuesta firme, sólida y valiente que huya de medidas vehementes y que persiga un fin concreto para dar cabida a cualquier uso y disfrute de este privilegiado entorno.

 

Fco. Javier Toraya, LIENCRES