Servicio diario - 14 de mayo de 2017


La necesidad de “una atención concreta a la vida y a la maternidad”
Anne Kurian

Irlanda: beatificación de John Sullivan, “padre de los pobres”
Anne Kurian

Regina Caeli: canonización de Francisco y de Jacinta de Fátima
Anne Kurian

Solidaridad del Papa con los pueblos que sufren conflictos
Anne Kurian


 

14 mayo 2017
Anne Kurian

La necesidad de “una atención concreta a la vida y a la maternidad”

El Papa invita a cada uno a orar por su mamá

(ZENIT – Roma, 14 mayo 2017). – “El futuro de nuestras sociedades exige por parte de todos, especialmente de las instituciones, una atención concreta a la vida y a la maternidad” ha declarado el Papa Francisco el 14 de mayo de 2017, durante la oración del Regina Coeli que ha presidido en la plaza San Pedro.

Saludando a la gente desde una ventana del palacio apostólico, el Papa evoca la fiesta de las madres, que se celebraba ese día en muchos países, (en España el 7 de mayo): acordémonos con gratitud y afección de todas las mamás e incluso de nuestras mamás en el cielo, confiándoselas a María, la mamá de Jesús.”

El Papa también ha invitado a los 25.000 fieles a recogerse con él: “En este momento os hago una proposición: permanezcamos unos instantes en silencio, cada uno orando por su mamá”.

Traducción por Raquel Anillo

 

14/05/2017-20:27
Anne Kurian

Irlanda: beatificación de John Sullivan, “padre de los pobres”

(ZENIT- Roma, 14 mayo 2017). – Al día siguiente de la beatificación del jesuita irlandés John Sullivan, el Papa Francisco ha rendido homenaje a este “padre de los pobres y de los que sufren”, en el Regina Coeli del 14 de mayo 2017.
Después de la oración mariana en la Plaza San Pedro, el Papa ha lanzado también una
llamada en favor de los pueblos que sufren conflictos y ha invitado a orar por las madres.
Palabras del Papa después del Regina Coeli
Queridos hermanos y hermanas,
Yo confío a María Reina de la paz, la suerte de los pueblos afligidos por las guerras y conflictos, en particular en el Oriente Medio. Muchas personas inocentes son duramente probadas, lo mismo cristianos que musulmanes o los pertenecientes a minorías como los yazidis, que sufren violencias y discriminaciones dramáticas. Mi solidaridad se acompaña del apoyo en la oración, lo mismo que doy gracias a aquellos que se comprometen a apoyar en las necesidades humanitarias.
Animo a las diversas comunidades a recorrer el camino del diálogo y de la reconciliación para construir un futuro de respeto, de seguridad y de paz, alejado de toda clase de guerra.
Ayer, en Dublín, el padre jesuita John Sullivan ha sido proclamado bienaventurado. Habiendo vivido en Irlanda entre los siglos XIX y XX, dedica su vida a la enseñanza y a la formación espiritual de jóvenes, y él fue amado y buscado como un padre de los pobres y de los que sufren. Damos gracias a Dios por su testimonio.
Os saludo a todos, fieles de Roma y peregrinos de Italia y de los diversos países, en particular los fieles de Ivrea, Salermo, Valmontone y Rimini: a los obispos de Potenza y de Mozzo (Bergamo).
Saludo a los participantes de la iniciativa llamada “Passeggini vuoti” (cochecitos vacios) y al grupo de mamás de Bordighera: el futuro de nuestras sociedades exige por parte de todos, especialmente de las instituciones, una atención concreta a la vida y a la maternidad. Esta llamada es particularmente significativa hoy que celebramos en muchos países la fiesta de las madres: acordémonos con gratitud y afección de todas las madres y también nuestras madres en el cielo, confiándoselas a María, la mamá de Jesús. En este momento os hago una proposición: permanezcamos en silencio unos instantes, orando cada uno por su mamá.
...
A todos os deseo un buen domingo. Por favor, no os olvidéis de orar por mí. Buen apetito, y adiós.

©Traducción de ZENIT, Raquel Anillo

 

14/05/2017-20:33
Anne Kurian

Regina Caeli: canonización de Francisco y de Jacinta de Fátima

(ZENIT- Roma, 14 de mayo 2017). – “Con la canonización de Francisco y de Jacinta... yo también he querido proponer a toda la Iglesia el cuidado de los niños”, ha explicado el Papa Francisco a su vuelta de Fátima, el 14 de mayo de 2017.
Presidiendo la oración del Regina Coeli en la plaza San Pedro, al día siguiente de su peregrinación al santuario portugués, el Papa ha evocado el “clima recogido y contemplativo” de estas dos jornadas durante las cuáles ha canonizado a los dos pastorcitos, videntes de Fátima.
La Virgen María, ha subrayado, “ha elegido el corazón inocente y la simplicidad” de los niños. “Su santidad, ha añadido el Papa, no es la consecuencia de las apariciones, sino de la fidelidad y del ardor con los cuales han respondido al privilegio de poder ver a la Virgen María... Rezaban frecuentemente el Rosario, haciendo penitencia y ofreciendo sacrificios para obtener el fin de la guerra y por las almas que más necesidad tenían de su misericordia”.
“En nuestros días también, afirma, hay tanta necesidad de oración y de penitencia para implorar la gracia de la conversión, para implorar el fin de tantas guerras que hay por todo el mundo, que se extienden cada vez más, lo mismo que el fin de tantos conflictos absurdos, grandes y familiares, pequeños, que desfiguran el rostro de la humanidad”.
Palabras del Papa antes del Regina Coeli
¡Queridos hermanos y hermanas, buenos días!
Ayer por la tarde volví de mi peregrinación a Fátima: ¡saludemos a la Virgen de Fátima! Y nuestra oración mariana de hoy toma un significado particular, cargado de memoria y de profecía para quienes miran la historia con los ojos de la fe.
En Fátima me he sumergido en la oración del santo Pueblo fiel, oración que fluye desde hace cien años como un rio, para implorar la protección materna de María sobre el mundo entero. Demos gracias al Señor que me ha concedido ir a los pies de la Virgen Madre como peregrino de esperanza y de paz. Y doy gracias de todo corazón a los obispos, al obispo de Leiria-Fátima, a las autoridades del Estado, al presidente de la República y a todos aquellos que han ofrecido su colaboración.
Desde el principio, cuando en la capilla de las apariciones permanecí en silencio largo tiempo, acompañado por el silencio orante de todos los peregrinos, se creó un clima de recogimiento y contemplativo, durante el cual se desarrollaron los diversos momentos de oración. Y en el centro de todo estuvo el Señor Resucitado, presente en medio de su Pueblo en la Palabra y en la Eucaristía. Presente en medio de numerosos enfermos, que son protagonistas de la vida litúrgica y pastoral de Fátima, como de todos los santuarios marianos.
En Fátima la Virgen ha escogido el corazón inocente y la simplicidad de los pequeños Francisco, Jacinta y Lucia, los depositarios de su mensaje. Estos niños lo han acogido dignamente, y son reconocidos como testigos fiables de las apariciones, convirtiéndose en modelos de vida cristiana. Con la canonización de Francisco y Jacinta, he querido proponer a toda la Iglesia su ejemplo de adhesión a Cristo y de testimonio evangélico.
También he querido proponer a toda la Iglesia de tomar como cargo el cuidado de los niños. Su santidad no es consecuencia de las apariciones, sino de la fidelidad y del ardor con los cuales han respondido al privilegio de poder ver a la Virgen María. Después del encuentro con la “Bella Dama”, ellos la llamaban así, rezaban frecuentemente el Rosario, haciendo penitencia y ofreciendo sacrificios para obtener el fin de la guerra y por las almas que más necesidad tenían de su misericordia.
En nuestros días también, hay tanta necesidad de oración y de penitencia para implorar la gracia de la conversión, para implorar el fin de tantas guerras por todo el mundo, que se extienden cada vez más, lo mismo que el fin de tantos conflictos absurdos, grandes y familiares, pequeños, que desfiguran el rostro de la humanidad.
Dejémonos guiar por la luz que viene de Fátima. Que el Corazón inmaculado de María sea siempre nuestro refugio, nuestro consuelo y el camino que nos conduce a Cristo.

© Traducción de ZENIT, Raquel Anillo

 

14/05/2017-20:34
Anne Kurian

Solidaridad del Papa con los pueblos que sufren conflictos

(ZENIT- Roma, 14 mayo 2017). – En el Regina Coeli del 14 de mayo de 2017, en la plaza San Pedro, el Papa francisco ha expresado su solidaridad con los pueblos afligidos por los conflictos, especialmente el Oriente Medio.
“Cuantas personas inocentes son duramente probadas”, ha lamentado después de la oración mariana, “cuantos cristianos, lo mismo que musulmanes o pertenecientes a comunidades minoritarias como los yazidis, que sufren violencia y discriminaciones dramáticas”.
El Papa ha animado “a las diversas comunidades a recorrer el camino del diálogo y de la reconciliación para construir un futuro de respeto, de seguridad y de paz, alejado de toda clase de guerra”.
“Mi solidaridad se acompaña del apoyo en la oración “ ha asegurado el Papa Francisco al día siguiente de su peregrinación a Fátima: Confío a María, Reina de la paz, a todos los pueblos afligidos por las guerras y los conflictos, en particular al Oriente Medio”.
Ha dado las gracias también “a aquellos que se comprometen en el apoyo de las necesidades humanitarias” de los pueblos.
En su meditación a la introducción al ángelus, había subrayado: “En nuestros días también hay tanta necesidad de oración y de penitencia para implorar la gracia de la conversión, para implorar el fin de tantas guerras por todo el mundo, que extienden cada vez más, lo mismo que el fin de tantos conflictos absurdos, grandes y familiares, pequeños, que desfiguran el rostro de la humanidad”.

Traducción por Raquel Anillo